La oposición rusa ha convocado para mañana, jueves, una protesta por el arresto administrativo de uno de sus líderes, Serguéi Udaltsov, cuya liberación ha sido exigida por numerosos políticos y defensores de los derechos humanos.

Al no obtener autorización del Ayuntamiento de Moscú, los partidarios de Udaltsov, dirigente del Frente de Izquierdas (FI), protestarán en el marco de un mitin convocado para la ocasión por el diputado socialdemócrata, Iliá Ponomariov.

"Es una variante de compromiso, ya que el Ayuntamiento no autorizó la protesta. No se pueden enarbolar pancartas, corear eslóganes tampoco se permite, pero el encuentro con un diputado sí permite utilizar megáfonos", dijo al diario digital Gazeta.ru.

Ponomariov explicó que "el encuentro con un diputado es el único formato que permite evitar detenciones. Este formato está permitido, pero, de todas formas, hemos enviado la solicitud".

"Será un encuentro con los electores en el que se discutirá qué podemos hacer para respaldar a Serguéi. Por supuesto, la última detención será el tema principal", dijo.

Varios miles de personas han expresado su intención de acudir a la céntrica plaza Pushkin para participar en la protesta, que tendrá lugar dos días antes de que comiencen los diez días festivos del Año Nuevo ortodoxo.

El exministro de Finanzas ruso, Alexéi Kudrin, estrecho colaborador durante años del primer ministro, Vladímir Putin, tachó hoy de excesiva la condena a diez días de arresto administrativo impuesta a Udaltsov por resistirse a la autoridad policial.

Mientras, el magnate Mijaíl Prójorov, que se propone presentar su candidatura a las elecciones presidenciales de marzo próximo, pidió hoy la liberación de Udaltsov.

Udaltsov, cuya organización ha sido durante los últimos años una de las más activas en las protestas antigubernamentales, había sido condenado a quince días de arresto por resistencia a la autoridad y el mismo día que debía ser liberado fue sentenciado a otros diez días.

Putin se mostró hoy por primera vez abierto al diálogo con la oposición, a la que al mismo tiempo criticó por carecer de un único programa y por falta de liderazgo.

"Debe haber diálogo, pero pensaré en qué forma. Nosotros no hemos estado nunca en contra del diálogo con la oposición, siempre hemos estado a favor", dijo.

La oposición exige la anulación de los resultados de las elecciones legislativas por fraude oficialista, su repetición en 2012, el registro de todos los partidos, la liberación de los presos políticos y la destitución del presidente de la Comisión Electoral Central, Vladímir Chúrov.

Putin aseguró ayer que no es posible revisar los resultados de las parlamentarias del 4 de diciembre y acusó a la oposición de intentar deslegitimar las próximas elecciones presidenciales de marzo de 2012 a las que concurrirá como candidato oficialista.