La Alta Comisionada de las Naciones Unidas (ONU) para los Derechos Humanos, Michelle Bachelet, expresó sus preocupaciones relacionadas a Venezuela, entre las que destacan el levantamiento de la inmunidad parlamentaria a opositores, los presos políticos y la violencia en el país.

La diplomática y expresidenta chilena realizó ayer una segunda actualización oral de su informe presentado en julio sobre la situación de derechos humanos en Venezuela.

En esta oportunidad, Bachelet señala que 2020 será un año electoral en el país, por lo que asegura que “es crucial garantizar las libertades públicas que son fundamentales para crear las condiciones necesarias para unas elecciones libres, imparciales, creíbles, transparentes y pacíficas”.

Destaca su preocupación por el levantamiento de la inmunidad de 30 diputados opositores, incluido el presidente de la Asamblea Nacional, Juan Guaidó, reconocido por 50 países como el presidente encargado del país.

La Alta Comisionada destaca que en los últimos tres meses su equipo realizó nueve visitas a centros de detención gestionados por el Ministerio de Servicios Penitenciarios y el Ministerio de Defensa y  entrevistaron a 70 personas.

En el mismo periodo, documentaron 118 casos de personas privadas de libertad que requieren de una respuesta por motivos de salud, retrasos judiciales, falta de ejecución de boletas de excarcelación por cumplimiento de pena.

“Insto a las autoridades a liberar a todas las personas detenidas por motivos políticos, incluyendo a militares”, señaló la comisionada. Resaltó la solicitud que “se otorgue libertad plena” al diputado Juan Requesens, quien lleva detenido más de un año.

Además, agregó como preocupante “los llamados por parte de autoridades de alto nivel para seguir armando a las milicias (grupos de civiles)”; así como la presentación, ante la oficialista Asamblea Nacional Constituyente, de una propuesta de ley que fortalece e incorpora la milicia nacional a la Fuerza Armada Nacional.

Bachelet sostuvo que, en ese contexto, se teme que las restricciones a la entrada de venezolanos impuestas por algunos países de la región, así como las dificultades para la obtención de documentos para viajar, propicien más el éxodo en el país.

La ONU estima que a finales de 2020 el número de venezolanos que abandonarán el país llegará a 6,5 millones, frente a 4,7 millones en la actualidad. (I)