La ciudad española de Ceuta recibió este domingo la llegada de otros 24 inmigrantes irregulares -entre ellos ocho menores-, lo que eleva casi al centenar la cifra de personas sin la documentación en regla para acceder al territorio español que alcanzaron sus costas en la primera semana de agosto.

La oleada de inmigrantes, la mayoría procedentes de países africanos, se ha redoblado en los últimos meses, con 123 que arribaron en junio, 315 en julio y 99 en los primeros días de este mes.

Las autoridades españoles pusieron en marcha, como en años anteriores, la llamada "Operación Feriante" para impedir que inmigrantes irregulares intenten llegar a la Península escondidos en en las atracciones de feria tras el final de las fiestas en Ceuta, ciudad autónoma situada en el norte de África, fronteriza con Marruecos.

El comienzo de esta operación supuso la detención en el recinto ferial de 16 inmigrantes, entre ellos ocho menores de edad, mientras que otro inmigrante subsahariano fue detenido en el puerto ceutí oculto en un camión.

Agentes de la Guardia Civil interceptaron también dos balsas playeras en las que viajaban 14 inmigrantes -siete en cada una de ellas-, todos jóvenes subsaharianos.

Además, la Guardia Civil intervino una barca con 8 inmigrantes marroquíes, aunque éstos no permanecerán en la ciudad ya que serán entregados a las autoridades de Marruecos por el convenio de readmisión de sus nacionales.

También en el puerto ceutí, la Policía localizó a dos inmigrantes subsaharianos escondidos en el propulsor de una embarcación de alta velocidad que fueron hallados antes de que el barco hubiese arrancado las turbinas.

Esta presión migratoria ha motivado que el Centro de Estancia Temporal de Inmigrantes de esta ciudad autónoma española se encuentre un 30 por ciento por encima de su capacidad, cifrada en 512 plazas.

El centro alcanzó hoy su capacidad máxima al llegar hasta los 732 inmigrantes censados.

Los intentos de entrar en territorio español se han redoblado en las últimas semanas en aguas próximas a Ceuta, hasta donde intentan llegar decenas de inmigrantes procedentes de distintos países subsaharianos utilizando a veces lanchas de playa o incluso a nado.