Tres años después de las elecciones que llevaron a la oposición venezolana a ganar la mayoría de dos tercios en la Asamblea Nacional (AN-Parlamento), los diputados saben que oponerse al presidente Nicolás Maduro puede ser riesgoso para sus vidas.

Tras la detención del vicepresidente de la AN, Édgar Zambrano, para enjuiciarlo por su participación en el fallido alzamiento militar del 30 de abril, la lista de diputados contra los que actuó Maduro asciende a 24.

Zambrano, de 63 años, es uno de los siete parlamentarios a quienes el Tribunal Supremo de Justicia, bajo las órdenes de Maduro, retiró la inmunidad y los acusa de delitos de traición a la patria, conspiración, instigación a la insurrección, rebelión civil, entre otros.

En el momento de la detención, Zambrano estaba en su camioneta frente a las oficinas de su partido, Acción Democrática, en un barrio del norte de Caracas, reportó él mismo en su cuenta de Twitter.

Fue arrestado por miembros del Servicio Bolivariano de Inteligencia Nacional (Sebin) y llevaba $ 9.000 en efectivo, según el titular de la oficialista Asamblea Nacional Constituyente (ANC), Diosdado Cabello.

Juan Guaidó, jefe de la AN y reconocido como presidente interino de Venezuela por 50 países, convocó a los medios de comunicación en la sede de su partido, Voluntad Popular. Habló de un “golpe al Parlamento”, en referencia a los diputados perseguidos, exiliados o en la cárcel.

Guaidó convocó a sus seguidores a nuevas movilizaciones para este sábado y aseguró que Maduro está solo y que “la única relación (de los venezolanos) con el Estado es el terror y los subsidios”.

Incluso así, el sucesor de Hugo Chávez mantiene el control de las fuerzas de seguridad, como demostró a pesar de las grietas internas la detención de Zambrano, destacó el diario El País.

La embajada de Estados Unidos en Caracas pidió la liberación del vicepresidente del Parlamento y aseguró que si esto no se produce “habrá consecuencias”.

Asimismo, el presidente estadounidense, Donald Trump, rechazó en su cuenta de Twitter la detención de Zambrano y reiteró su  apoyo a la operación que emprende Guaidó para sacar del poder a Maduro. 

El Grupo de Lima repudió, también, mediante un comunicado, el retiro de la inmunidad parlamentaria a legisladores de la oposición y la detención de Zambrano.

El canciller de Maduro, Jorge Arreaza, por su parte, rebatió los pronunciamientos internacionales. En su cuenta de Twitter aludió a la Constitución para justificar el arresto y las medidas recientes contra los opositores. (I)