Nicaragua mantiene la alerta roja tras sismo que dejó 1 muerto y 33 heridos
Nicaragua vive hoy su tercer día en estado de alerta luego de que el jueves un terremoto de magnitud 6,2 Richter afectara varias ciudades del país, dejando un muerto, 33 heridos graves y 2.141 viviendas afectadas, y que ha sido seguido de más de 1.000 réplicas menores y otro sismo de magnitud 6,7.
El Gobierno del presidente nicaragüense, el sandinista Daniel Ortega, mantuvo este sábado la alerta roja en el litoral Pacífico, que ordena a la población evacuar sitios de peligro, y anunció que ejecutará un plan para reconstruir y reemplazar las viviendas dañadas.
Según el último informe del Sistema Nacional para la Prevención, Mitigación y Atención de Desastres (Sinapred), un total de 2.141 familias resultaron con sus casas dañadas total o parcialmente, en especial por el terremoto de 6,2 Richter del jueves, con epicentro bajo el lago Xolotlán, frente a las costas del municipio de Nagarote.
Nagarote, con 1.200 viviendas afectadas y a 40 kilómetros al noroeste de Managua, fue el municipio más afectado por el movimiento telúrico del jueves, el más fuerte sentido en Nicaragua desde el terremoto que devastó la capital del país en 1972 y mató a unas 5.000 personas, dejó a otras 20.000 heridas y a más de 250.000 sin hogar, según los datos disponibles.
En Nagarote, donde colapsaron 47 casas, sus habitantes continúan levantando los escombros tras ese terremoto, donde los daños alcanzaron intensidades de entre IX y X grados en la escala de Mercalli, de un máximo de XII.
"En Nagarote jamás se había sentido un terremoto con esa magnitud", dijo a Efe el profesor retirado Danilo Pérez, cuya vivienda resultó dañada por el fuerte sismo, que causó pánico en ese municipio de más de 36.000 habitantes.
El terremoto sacó a las calles a sus pobladores, que nerviosos y alarmados, buscaron consuelo y apoyo entre sí, y se apiñaron afuera de sus casas, en patios de sus viviendas o en campos abiertos para protegerse de las réplicas o un sismo mayor.
Algunos habitantes de Nagarote aún continúan con sus camas y colchones en las calles, otros en albergues temporales, por miedo a una réplica fatal que haga colapsar sus viviendas.
Zuleyka Guzmán, madre de cuatro hijos, incluyendo trillizos, dijo a Efe que lleva dos noches durmiendo en el patio de la vivienda que alquila, porque se derrumbó una pared que cayó sobre un sofá en la sala, y teme que la casa sucumba.
El Sinapred reportó el fallecimiento de una mujer de 23 años, a causa de un paro cardíaco, ocasionado por el terremoto de 6,2 Richter del jueves, y 33 heridos graves.
El sismo de magnitud 6,7 registrado el viernes y con epicentro a 19 kilómetros al suroeste del volcán Mombacho, en el departamento de Granada, causó daños a 194 viviendas, incluidas 101 en el municipio de Diriá, de acuerdo con el balance oficial leído por la primera dama y portavoz del Gobierno sandinista, Rosario Murillo.
Hasta ahora, el Instituto Nicaragüense de Estudios Territoriales (Ineter) registra más de 1.000 réplicas del sismo del jueves.
Las autoridades han extremado las medidas de seguridad en Nicaragua, entre ellas derribar unas 80 estructuras verticales en Managua, que estaban en ruinas desde el terremoto de 1972.
Todos los estudiantes en la vertiente del Pacífico nicaragüense fueron enviados a sus casas como medida de prevención y los espectáculos artísticos y deportivos en Nicaragua fueron suspendidos a causa de las réplicas del terremoto.
Asimismo, el Gobierno anunció que un grupo de expertos en sismología y vulcanología de Cuba llegarán este domingo a Nicaragua para evaluar las fallas que han provocado los fuertes temblores y sus réplicas.