May urge a la UE a iniciar acuerdo comercial tras el Brexit
La primera ministra británica, Theresa May, urgió este jueves a los líderes europeos a iniciar "lo más pronto posible" la discusión de su futuro acuerdo comercial, después de haber alcanzado un primer acuerdo sobre los términos del divorcio.
Ante sus socios europeos en una cena de trabajo en la que se sirvieron langostinos asados, la primera ministra dejó claro que "quiere avanzar en las negociaciones comerciales lo más pronto posible", señaló un responsable británico que pidió el anonimato.
Para lanzar esta nueva fase de negociaciones, la UE quería primero progresos "suficientes" en las prioridades de la separación: frontera en la isla de Irlanda, derechos de ciudadanos expatriados y liquidación financiera. Un avance que confirmarán el viernes, según el proyecto de conclusiones consultado por la AFP.
Esta luz verde abrirá la puerta a discutir sobre la futura relación, si bien la voluntad de los 27 socios de May es abordar el eventual acuerdo de libre comercio a partir de marzo y centrarse primero, desde enero, en un período de transición de dos años tras la salida de Reino Unido el 29 de marzo de 2019.
"Hay buenas posibilidades de que podamos pasar a la segunda fase", afirmó optimista la canciller alemana, Angela Merkel, al llegar el jueves a Bruselas para esta cumbre de dos días.
'Verdadera prueba' de unidad
Theresa May acudió a esta reunión debilitada tras sufrir la víspera una derrota en una votación clave sobre el Brexit en el Parlamento.
Varios diputados de su partido conservador se sumaron a la oposición para imponer que el Parlamento británico tenga la última palabra sobre el acuerdo de divorcio final con la UE.
"Estoy decepcionada", admitió May al llegar a Bruselas, pero aseguró que su país está "en buen camino para cumplir con sus promesas sobre el Brexit, en base a la decisión de los británicos".
Esta derrota pone un freno abrupto a una semana triunfal que empezó el viernes pasado en Bruselas cuando logró alcanzar, contra todo pronóstico, un acuerdo con la UE que abre la puerta a discutir de la futura relación y que deben confirmar sus pares.
Ahora, "cuando negocie algo, tendrá que regresar a Londres para obtener una aprobación", estimó el primer ministro luxemburgués, Xavier Bettel. Esto "complica las cosas para el gobierno de Reino Unido".
Donald Tusk, el presidente del Consejo europeo, instancia que reúne a los jefes de Estado y de gobierno, pronosticó que la segunda fase de las negociaciones del Brexit serán "la verdadera prueba" de la unidad de los 27.
Temas espinosos
El divorcio con Reino Unido, la primera salida de un país en seis décadas de proyecto europeo, representa la principal crisis de una UE que reflexionará también en la cumbre sobre las lecciones de otras dos crisis recientes: la migratoria y la económica.
Dos años después del pico de la crisis migratoria, los europeos siguen intentando pactar una respuesta duradera a este fenómeno, "un largo proceso que logró, con todo, resultados", según una fuente europea.
En su carta de invitación a la cumbre, Tusk instó a los líderes a tener una conversación "abierta y franca" sobre los aciertos y errores de la UE ante la crisis migratoria, un asunto espinoso que provocó un choque reciente entre Tusk y la Comisión Europea.
El presidente del Consejo Europeo, que coordina los trabajos de los mandatarios, subrayó en una nota el fracaso del sistema de reparto de refugiados basado en cuotas, que le valió las críticas del comisario europeo de Migración, Dimitris Avramopoulos, quien lo acusó de "socavar" el "principio de solidaridad".
Tusk "tiene razón", estimó por su parte un diplomático europeo, para quien el foco debería ponerse en el control de fronteras, la cooperación con Libia y un fondo permanente para luchar contra la migración ilegal.
"Cada uno debe poner de su parte para encontrar convergencias", declaró el presidente de Francia, Emmanuel Macron, a su llegada a Bruselas.
El futuro de la zona euro centrará los debates el viernes por la mañana en una 'cumbre del Euro', en las que los mandatarios debatirán sobre las reformas propuestas por la Comisión para reforzar los países del euro ante futuras crisis. (I)