Más de 300 organizaciones contrarias al golpe en Brasil
Más de 300 agrupaciones de los frentes Brasil Popular y Pueblo Sin Miedo entregaron al presidente del Senado brasileño, Renan Calheiros, un manifiesto que rechaza el golpe en curso contra la presidenta Dilma Rousseff.
"Ningún golpe trajo para nosotros beneficios, sino solo retrocesos", dijo la vicepresidenta de la Central Unica de Trabajadores (CUT) Carmen Foro, una de las representantes de las organizaciones que llevó el documento a la cámara alta.
Foro comentó además que habían expresado a Calheiros el deseo de que el Senado no tuviera el comportamiento deplorable de la Cámara de Diputados cuando votó por la admisibilidad del pedido de juicio político contra la jefa de Estado.
"Queremos que esa Casa analice, de hecho, si hay mérito para el impeachment, ante la inexistencia de un crimen de responsabilidad", afirmó la dirigente, citada por el sitio web de la CUT.
La vicetitular de la central sindical reiteró asimismo que las organizaciones integradas en ambos frentes no reconocerán un gobierno encabezado por el vicepresidente Michel Temer, porque "no es legítimo", y aseguró que de ser así continuarán movilizados en las calles.
Por su parte, el Senado Federal emitió también una nota sobre el encuentro de este martes en la cual reseña la disposición de Calheiros a hacer todo cuanto esté a su alcance para garantizar la máxima previsibilidad democrática en este proceso.
En este difícil momento de la vida nacional es fundamental que, en la medida en que aumenten las dificultades, podamos conversar, sostuvo el presidente de la cámara alta, quien dijo tener una exacta dimensión de su papel y aseguró que demostrará imparcialidad y compromiso con Brasil y con la democracia.
El pedido de juicio político contra la mandataria brasileña es examinado ahora por una comisión especial del Senado compuesta por 21 legisladores, la cual escuchará el parecer de su relator el próximo 4 de mayo y dos días después votará si aprueba o no el inicio de un proceso de destitución.
Para que el dictamen obtenga el visto bueno se requiere solo el respaldo de la mayoría simple de los miembros del colegiado.
De aprobarse, el relatorio deberá ser aceptado también por el plenario de la Casa, en votación que se prevé realizar el 11 de mayo y será, en definitiva, la que determine la validez o no del impeachment. (I)