Dos mil personas se manifestaron este martes en Madrid contra la entrada en vigor de una controvertida legislación sobre seguridad y orden público, cuyos detractores consideran que ataca la libertad de expresión o instaura en la práctica la cadena perpetua.

"¡Que no!¡Que no somos delito!¡Que no!", corearon los manifestantes mientras recorrían el centro de Madrid en dirección a la emblemática Puerta del Sol de la capital, en medio de una ambiente festivo con son de tambores.

"No quieren que nadie proteste. Quieren que estemos todos callados", se queja Juan Sánchez, un joven estudiante de 21 años, que marcha enarbolando una bandera roja, amarilla y morada de la Segunda República española.

Esta nueva legislación, que entra en vigor el miércoles, ha recibido numerosas críticas de diversas oenegés, así como de asociaciones de abogados y de periodistas.

Entre las disposiciones de este paquete legislativo, el nuevo código penal introduce la figura de la "prisión permanente revisable", que equivale a la cadena perpetua, acompañada de un tiempo de reclusión mínimo de 25 años para los crímenes más graves como asesinatos múltiples.

Por su parte la "ley de seguridad ciudadana", conocida como ley mordaza, prevé multas de hasta 600.000 euros ($ 655.000) para ciertas manifestaciones o actos de protesta no autorizados.

También incluye multas de hasta 30.000 euros por desórdenes públicos o por obstruir acciones de las autoridades como expulsiones de familias desalojadas.

Una "falta de respeto" a un policía podrá por su parte ser sancionada con 600 euros.

"Te imponen los recortes y encima quieren que no protestes. Es un atentado a la libertad de expresión", asegura Pedro Álvarez, un jubilado de 67 años, rodeado de manifestantes con pancartas que muestran el dibujo de una cara con la boca tapada o con lemas como "La calle es de todos" o "Leyes represoras no nos callarán".

Álvarez hacía referencia a las duras políticas de austeridad impuestas por el gobierno conservador español desde su llegada al poder a finales de 2011 para enderezar las cuentas públicas.

"Con la entrada en vigor de la ley mordaza, el ejercicio del periodismo en nuestro país es menos libre", concluyó la Asociación de la Prensa de Madrid en un comunicado. (I)