El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, definió ayer a la polémica Asamblea Constituyente que convocó como un ‘poder supremo’ que podrá tomar decisiones incluso ‘por encima de la ley’.

“¿Qué puede hacer la Constituyente? Todo lo que quiera. Es el gran poder (...). Puede emitir una ley constitucional, por encima de la ley, estableciendo leyes de justicia firmes y de obligatorio cumplimiento por parte de todas las instituciones, la Fiscalía, los tribunales, etcétera”, dijo el mandatario durante su programa semanal en el canal estatal.

La iniciativa de Maduro es rechazada por la oposición, recrudeciendo las protestas contra el gobernante socialista, con disturbios que ya dejan 59 muertos en 58 días, según el balance de la Fiscalía. Gobierno y oposición se culpan mutuamente por los hechos violentos.

“Es una Constituyente para tener el poder supremo de luchar contra la corrupción en todas las partes donde esté enquistada (...). Es una Constituyente para cambiarlo todo”, afirmó Maduro.

La inscripción de candidatos para formar el organismo se realizará el jueves y el viernes próximos, anunció el Consejo Nacional Electoral. Los postulantes deberán inscribirse en un portal web y recaudar firmas que respalden su aspiración.

Las elecciones, según proyecta el CNE, se harán a fines de julio con un sistema que combina votación por municipios y por sectores sociales.

El mecanismo es considerado por analistas y dirigentes opositores como una ‘trampa’ con la que Maduro busca eludir el voto universal.

Maduro también repudió  la violencia generada en el país tras el llamado de la oposición a las protestas y exigió a los dirigentes de la ultraderecha condenar los crímenes de odio contra personas inocentes.

“La oposición, por silencio, es cómplice del terrorismo criminal que asesina inocentes en las calles”, aseveró el mandatario, tras lamentar el asesinato de un Guardia Nacional retirado, el sábado por parte de un grupo violento asociado con los grupos opositores en el estado Lara, norte del país. (I)