Lula sigue acuartelado a dos horas de que venza el plazo para su entrega
El expresidente brasileño Luiz Inacio Lula da Silva, intimado a presentarse a las 15:00 (de Ecuador) de este viernes 6 de abril para comenzar a cumplir una pena de 12 años de cárcel, seguía acuartelado en un sindicato de Sao Paulo a dos horas de que venza ese plazo.
Lula estaba en la sede del Sindicato de Metalúrgicos de la ciudad paulista de Sao Bernardo do Campo, donde hace casi cinco décadas comenzó su vida política y al que llegó la tarde del jueves 5 de abril, después de que fue dictada la orden de captura en su contra.
El exmandatario fue condenado por corrupción pasiva y lavado de dinero y permanecía en la sede del sindicato junto a dirigentes del Partido de los Trabajadores (PT) y de movimientos sociales, y ante el que se han congregado cientos de personas para expresarle apoyo.
Desde la mañana de este viernes 6 de abril, fuentes del PT y otros allegados a Lula han dicho desde que no pretende entregarse hasta que lo hará al límite del plazo fijado, en contradictorias declaraciones que han creado un clima de cierta tensión en Sao Bernardo do Campo.
Al mismo tiempo, su defensa y muchos de sus partidarios mantenían una firme ofensiva en los tribunales, mediante diversos pedidos de amparo que intentaban evitar su inminente arresto.
El juez federal Sergio Moro, responsable en primera instancia de los procesos vinculados a las corruptelas en Petrobras, en el marco de los cuales ha sido condenado Lula, dictó el jueves 5 de abril un auto de detención que deberá ser cumplido por la Policía Federal si no se entrega hasta las 15:00 (17:00 de Brasil).
Sin embargo, según las normas en vigor en Brasil, una orden de captura sólo puede ser cumplida entre las 06:00 y las 18:00 hora local, con lo cual si Lula no se entrega, serán las autoridades las que pasarán a tener un plazo de una hora para arrestarle.
Jorge Chastalo Filho, jefe del equipo de custodia y escolta de la Policía Federal de Curitiba, donde debe presentare Lula, declaró que la entrega puede ser en esa ciudad o incluso en Sao Paulo, caso en que sería trasladado en un avión policial, que le ha sido ofrecido.
El funcionario no aclaró qué actitud tomaría la policía si Lula se resiste y no se entrega dentro del plazo fijado. (I)