Lula se entregó a la Policía y será encarcelado en Curitiba
El expresidente brasileño Luiz Inácio Lula da Silva abandonó, la tarde de este sábado 7 de abril, la sede del Sindicato de los Metalúrgicos de Sao Bernardo do Campo en medio de un tumulto para entregarse a las autoridades.
La entrega de Lula demoró varias horas este sábaso 7 de abril después de un discurso dado esta mañana e incluso casi fue impedida por militantes que bloquearon los portones y no dejaron salir su automóvil.
Tras unas tensas negociaciones, Lula salió caminando en medio un enorme tumulto, subió a un automóvil y partió, seguido de inmediato por un convoy de la Policía Federal.
Luego un convoy policial trasladó al líder político hasta el aeropuerto de Congonhas de Sao Paulo para luego viajar hasta Curitiba, en donde lo espera una celda de 15 metros cuadrados.
Lula fue sentenciado a 12 años y un mes de prisión.
El Partido de los Trabajadores (PT), que ha sufrido su más duro golpe desde que Lula lo fundó en 1980, anunció que ahora la "resistencia" será mayor.
La presidenta del partido, Gleisi Hoffmann, convocó a toda la militancia de izquierdas a "ocupar" Brasilia y Curitiba, hasta que Lula deje la prisión.
"Ahora mismo comenzamos la campaña. Vamos para Curitiba, vamos para Brasilia, vamos acampar allá hasta conseguir la liberación del compañero Lula", dijo Hoffmann a las puertas del mismo sindicato en que el expresidente se atrincheró durante más de dos días.
Según Hoffmann, la militancia del PT acampará "desde el domingo" en Curitiba y el lunes hará lo mismo en Brasilia, para exigirle "la libertad de Lula a los magistrados golpistas de la Corte Suprema".
Pese a ello, en el Supremo reside la última esperanza de que Lula recupere la libertad, que es la revisión de una jurisprudencia que rige desde 2016 y permite la prisión de un condenado una vez que la sentencia se ratifica en segunda instancia, como es su caso. (I)