Los Verdes deciden apoyar con condiciones el "apagón" nuclear en Alemania
El partido verde alemán, pionero en la lucha contra la energía atómica, decidió hoy en un intenso congreso extraordinario en Berlín apoyar el "apagón" nuclear propuesto por el Gobierno de centro-derecha de la canciller Angela Merkel.
Tras seis horas de encendidas intervenciones, la postura defendida por la dirección ecopacifista, que apela a la coherencia, el pragmatismo y la responsabilidad, se impuso en una reñida votación a las tesis de los sectores opuestos a respaldar un plan que tachan de oportunista, insuficiente, tardío y poco democrático.
La dirección, que se empleó a fondo en el encuentro y recurrió a la retórica de sus principales figuras, abogó por un "sí" condicionado al proyecto de desconectar para 2022 los 17 reactores nucleares del país.
"Sí, pero... ésa es nuestra propuesta", dijo Claudi Roth, copresidenta de Los Verdes y representante de los sectores más izquierdistas del partido, en el discurso de apertura del congreso, al que asistieron 800 representantes.
Roth argumentó que el "apagón" nuclear es en sí un éxito de Los Verdes y un fracaso de los tradicionales partidarios de la energía atómica, a saber, los cristianodemócratas (CDU) de Merkel y los liberales (FDP).
Además, señaló que el proyecto del Gobierno, que incluye el cierre inmediato de ocho reactores y la apuesta por las energías renovables, es "bueno" y "debe ser apoyado por Los Verdes".
No obstante, Roth agregó que el respaldo de su partido el próximo miércoles en el Bundestag (Parlamento) "no es un cheque en blanco" para la coalición gobernante y recalcó que las reivindicaciones de Los Verdes no acaban en absoluto en el "apagón" nuclear.
Entre otros asuntos pendientes, destacó el cierre del depósito temporal de basura radiactiva de Gorleben (norte de Alemania), caballo de batalla del movimiento antinuclear germano, y el adelanto de la fecha final del "apagón".
"Sabemos que es posible abandonar la energía nuclear en 2017", indicó la copresidenta y avanzó que, si Los Verdes llegan al Gobierno tras las elecciones de 2013, acelerarán este proceso.
Además, Roth ahondó en la necesidad de cambiar el estigma de partido de oposición que pesa sobre los ecopacifistas y actuar con responsabilidad, al asegurar que Los Verdes tienen que hacer política "también desde la oposición".
El portavoz del grupo parlamentario de Los Verdes y exministro de Medio Ambiente, Jürgen Trittin, dijo en su intervención que la imagen del partido se vería dañada si finalmente ganaba el "no".
"¿Qué credibilidad tendríamos si nos posicionásemos en contra de nuestras propias propuestas?", preguntó a los asistentes, para añadir que aquellos que quieren desconectar los reactores para 2017 -la apuesta de los más radicales- deben primero apoyar un "apagón" en 2022, un avance frente a la fecha límite actual: 2040.
La dirección abogó, asimismo, por evitar que Merkel acapare en solitario el crédito político por acabar con la energía atómica en Alemania, tras más de tres décadas de lucha política de Los Verdes.
Por su parte, los sectores contrarios a apoyar al Ejecutivo alegaron que el proyecto de Merkel, diseñado a raíz de la catástrofe de Fukushima (Japón), tiene claras motivaciones electoralistas y carece de la determinación necesaria y del consenso político y social preciso.
Varios ponentes destacaron que en ningún punto de la propuesta de Merkel se aborda la situación de Gorleben y tampoco se incluye una cláusula de intangibilidad que impida que esta ley sea modificada con posterioridad.
Decenas de activistas del movimiento antinuclear alemán se manifestaron hoy frente al recinto ferial de Berlín donde se celebró el congreso extraordinario e instaron a los ecopacifistas a votar en contra del proyecto del Ejecutivo.
La crisis nuclear en Japón ha supuesto el espaldarazo definitivo para Los Verdes, que se encuentran desde hace meses en máximos históricos de intención de voto -por encima del 20 por ciento- y que en marzo nombraron a su primer jefe de Gobierno de un estado federado, Baden-Würtenberg.