En la penúltima jornada de campaña y cuando faltan tres días para los comicios presidenciales en Irán, los reformistas consiguieron ayer acordar un único candidato de consenso, mientras los ultraconservadores afilan su estrategia, de cara a las votaciones del viernes próximo.       

Ayer, el candidato reformista moderado Mohammad Reza Aref anunció que abandonaba la campaña para dar más opciones al otro candidato de su corriente, Hasan Rohani, aunque lo hizo con aparente desgano.

Los reformistas esperaban también la renuncia, en favor de Rohani, del tecnócrata Mohamad Gharazi, quien  hace días dijo que podría retirarse, pero ayer su hijo, Mohamad Zahir Gharazi, lo  negó y  afirmó que su padre seguirá en campaña.

Con Aref son dos los candidatos que han renunciado a la contienda electoral, con lo que quedan seis aspirantes en la carrera para los comicios de este viernes.  

El primero en retirarse de los ocho candidatos admitidos por el Consejo de Guardianes, que supervisa el sistema político de Irán, fue el diputado Gholam Ali Hadad Adel, uno de los cinco candidatos ultraconservadores y cercano al líder supremo, ayatolá Ali Jamenei. (EFE)