La Presidenta acusó de golpista al vicepresidente Michel Temer
Los medios callan la voz del gobierno brasileño
Dilma Rousseff debió convocar a la prensa internacional para dar los argumentos por los cuales su destitución en Brasil es nada más y nada menos que un "golpe de Estado". El motivo es que lo que dice Rousseff va desapareciendo de a poco de los grandes medios. Los analistas minimizan el ataque a la Constitución
denunciada por el gobierno y la misión ahora es maximizar las capacidades del vicepresidente Michel Temer para montar un gobierno de "salvación nacional" si la mandataria es retirada del cargo por el Senado.
El cerco informativo prácticamente no tiene la voz del gobierno. Ya no se usa la palabra golpe, ni siquiera en boca de la máxima autoridad del país.
Rousseff acusó de golpista al vicepresidente Michel Temer, a quien denunció por intentar vender "terrenos en la Luna" y ofrecer un plan económico para el sector empresario, sin tener en cuenta los planes sociales y la parte más vulnerable de la población. Y, reiteró, que políticos de amplia experiencia en conspiraciones pero sin voto "intentan tomar el poder de los 54 millones de brasileños" que la votaron.
El Senado determinó que la comisión de juicio político de la mandataria estará instalada el próximo martes 26. Si se cumplen todos los plazos como dicen fuentes parlametnarias y no hay trasos técnicos o de rito parlamentario, la votación clave será el 17 de mayo. Se espera que para esa fecha el Senado vote la acusación enviada por la Cámara de Diputados. Por mayoría simple de los 81 senadores, define si la acepta o no, y, en caso positivo, Rousseff deberá licenciarse del cargo por 180 días, hasta el juicio final. Temer asume en ese lapso.
"Hay que entender que este proceso no va a traer estabilidad política al país porque rompe la base de la democracia. Se trata de un golpe", afirmó Rousseff, quien culpó a la oposición de no aceptar la derrota ante ella en su reelección de 2014 y a la caída de los precios de las materias primas por el deterioro de la recaudación y la recesión económica.
Ella dijo que si la crisis económica puede ser motivo de destitución, varios gobernatnes de países desarrollados deberían estar destituidos, a raíz de la crisis en Estados Unidos y Europa.
Al explicar que no cometió delito de responsabilidad con los decretos para realizar movimientos internos en el presupuesto de 2015, la mandataria fustigó la campaña mediática del vicepresidente Temer de articular apoyos en el mundo empresarial que financió parte de las acciones publicitarias a favor del juicio político, autorizado el domingo por la Cámara de Diputados.
"Los golpistas dicen dicen que mantendrán los programas sociales. Nosotros hicimos un ajuste fuerte pero no lo hicimos para cortar el gasto social, sino para preservarlo. Yo creo que quienes están golpeando atienden a apenas un lado de la sociedad y están vendiendo terrenos en la Luna", fustigó la mandataria.
La presidenta aseguró que el presidente de la `Camara de Diputados, Eduardo Cunha, decidió en diciembre su proceso por "venganza" ya que el Partido de los Trabajadores se negó a protegerlo en la comisíon de ética sobre cuentas secretas que posee en Suiza, adonde habría cobrado sobornos de empresas vinculadas a contratos con Petrobras.
"Cunha apuesta a cuanto peor mejor, tiene antecedentes que no lo abonan como juez de nadie, sino como reo", dijo. Y dijo que en Brasil hay una "veta golpista adormecida" que datan desde la intentona golpista de 1954, que causó el suicidio del presidente Getulio Vargas.
La mandataria repudió también a Jair Bolsonaro, el diputado y candidato presidencial de la ultraderecha militarista y ultrareligiosa que cuando el domingo votó por su juicio político lo hizo homenajeando a Carlos Brilhante Ustra "a quien Dilma le tenía pavor", el jefe de la policía política de la dictadura en Sao Paulo. Rousseff, miembro de la resistencia a la dictadura, estuvo detenida política entre enero de 1970 y diciembe de 1972. Fue torturada durante 22 días seguidos.
"Yo conocí a ese señor. Fue uno de los mayores torturadores de Brasil, no tan solo torturador, sino con acusación de asesinatos. Lamento este tipo de declaración que abre espacio al odio", afirmó Rousseff, quien consideró que forma parte d ela "gravísima aventura golpista".
"Resistiré", dijo la mandataria, que incluso puede acudir a la corte suprema para discutir los argumentos de la Càmara de Diputados, donde la mayoría de los opositores es el hazmereir en las redes sociales por sus votos "por Dios y la familia". Apenas uno citó el caso del movimiento financiero en el presupuesto para cumplir obligaciones sociales, la acusación. La mayoría pertenece al llamado "bajo clero" dominado por Cunha, que ahora se ha tragado también a la llamada oposición socialdemócrata hacia las tinieblas de la política.
El vicepresidente Temer instaló en su casa de la ciudad de Sao Paulo su cuartel general para montar su gobierno. En una breve declaración, dijo que esperará en forma "silenciosa y respetuosa" la decisión del Senado para luego pronunciarse.
Temer busca respaldos y por eso el lunes cenó en San Pablo con el senador Aecio Neves, presidente del Partido de la Social Democracia Brasileña (PSDB), derrotado por Rousseff en 2014 quien dijo tener un programa de emergencia de gobierno en caso de que Dilma sea destituida.
Hoy, Neves comenzó a reclamar al presidente del Senado, Renán Calheiros, que el PSDB pueda presidir la comisión de juicio político que será montada el próximo martes en la cámara alta.
Calheiros pertenece al PMDB de Cunha y de Temer, pero siempre tuvo posicionamientos más cercanos al el expresidente Luiz Inácio Lula da SIlva y Rousseff. Calheiros ha recibido el expediente y comenzado el proceso de elección de los 21 miembros de la comisión de la cámara alta. El sitio judicial Jota estimó que de acuerdo al cronograma acelerado que la oposición logrará imprimir a los trabajos, de martes a jueves, habrá votación en comisión el 10 de mayo y en el plenario el día 17.
En medio de los problemas del gobierno por buscar una mayoría con la cual no cuenta en el Senado, el Supremo Tribunal Federal deberá reunirse en plenario mañana para tratar la asunción como jefe de gabinete de Lula, suspendida hace 32 días por una medida cautelar que consideró que era un salvoconducto para ganar fueros frente a la investigación abierta por el juez Sergio Moro, del escándalo Petrobras, sobre dos propiedades.
La resistencia de la que habla Rousseff fue anunciada en parte hoy por el presidente de la Central Unica de Trabajadores (CUT), Vagner Freitas: "Vamos a hacer el 1o de Mayo más importante de la historia. Si están pensando que nos derrotarán con el voto de este Congreso corrupto, están muy engañados. Vamos a decirle al presidetne de la Cámara de Diputados que no pararemos hasta que lo detengan".
El cerco al gobierno se intensificó, también, porque el presidente de la Cámara de Diputados, Eduardo Cunha, anunció que no recibirá ningún proyecto de ley nuevo que envié el gobierno de Rousseff. "El gobierno ha dejado de existir para la Càmara de Diputados", subrayó.