El liderazgo de Guaidó contra Maduro no convence a Trump
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, está dispuesto a reunirse con el presidente venezolano, Nicolás Maduro, al tiempo que reconoce que ha dudado sobre su decisión de reconocer a Juan Guaidó como líder legítimo de Venezuela.
Al ser preguntado sobre si se reuniría con Nicolás Maduro, Trump aseguró: “A Maduro le gustaría reunirse. Y nunca me opongo a las reuniones, ya sabes, rara vez se oponen a las reuniones”, confesó durante una entrevista publicada en el diario digital Axios.
Horas después acotó en su cuenta de Twitter: “Solo me reuniría con Maduro para discutir una cosa: una salida pacífica del poder”. Además, escribió que siempre se posicionará “contra el socialismo” y a favor de la libertad del pueblo de Venezuela.
Durante la entrevista, Trump admitió que no confía demasiado en Juan Guaidó, actual presidente encargado de Venezuela, y principal opositor de Maduro, ya que después de año y medio y con el apoyo de Estados Unidos y otros 60 países, no ha conseguido arrebatar el poder a Maduro.
Trump se explica, dice que “Guaidó fue elegido”. Admite que él “no estaba necesariamente a favor, pero a alguna gente le gustaba, a otra no. A mí me parecía bien. No creo que fuera muy significativo de una u otra manera”.
No es la primera vez que Trump recela de Guaidó, tras reconocerlo como presidente legítimo. Según las memorias de su exconsejero de Seguridad Nacional, John Bolton, Trump aseguró que Guaidó “le parecía un crío” en comparación con Maduro.
La posible decisión de Trump de mantener un encuentro con Maduro, supone un cambio en la estrategia de política exterior de Estados Unidos respecto a Venezuela.
Durante los últimos años la administración Trump defendió a Guaidó, incluso el vicepresidente Mike Pence y el consejero de Seguridad, Mike Pompeo, respaldaron al opositor venezolano. Pero con las palabras de Trump parece que el respaldo podría empezar a tambalearse.
Según Axios, en 2017, el gobierno venezolano de Maduro contactó con la Casa Blanca y al Departamento de Estado en dos ocasiones para expresar la voluntad de Maduro de reunirse con Trump.
Una vez se envió una carta por escrito y en otra ocasión, la propia Embajada de Venezuela llamó a la Casa Blanca, para pedir cita. El encuentro está pendiente.
Las visas de trabajo son restringidas
El gobierno de Donald Trump emitió una orden ejecutiva que restringe la entrada al país de trabajadores extranjeros y afecta los procesos de residencia legal permanente hasta diciembre del 2020.
La Casa Blanca justifica la medida -que extiende un decreto firmado a mediados de abril que prohibía la emisión de nuevos permisos de residencia durante 60 días- argumentando que ayudará a crear más de 500.000 puestos de trabajo en el país, donde más de 40 millones de personas quedaron sin empleo en los últimos tres meses como consecuencia de la pandemia del coronavirus.
El decreto congela las visas H-1B (servicios en campo especializado o investigación), L-1 (servicios a compañías y H-2B (contratación temporal), que son los permisos de ingreso y permanencia en territorio norteamericano que se entregan a las personas que buscan trabajar en Estados Unidos, dependiendo de la labor que desempeñan.
El plan de Trump entra en vigor el próximo 24 de junio y no afectaría a ciertos trabajadores profesionales extranjeros que ya se encuentran o tienen permiso para trabajar legalmente en Estados Unidos.
Además de congelar los nuevos visados, la Casa Blanca también planea poner fin en los próximos días a la lotería de H-1B, por la que un 40% de los solicitantes de este visado son elegidos. (I)