La Unión Europea impone nuevas sanciones a Siria
Los ministros de Exteriores europeos aprobaron este lunes en Bruselas una nueva ronda de sanciones contra Siria con el objetivo de debilitar el régimen de Bashar al Asad, por la represión contra las revueltas populares que se iniciaron hace casi un año en el país.
Las medidas apuntan sobre todo a congelar los depósitos del Banco Central sirio y la mayoría de transacciones con esa entidad, y prohíben las importaciones a la UE de oro y otros metales preciosos.
Además, siete miembros del Ejecutivo de Damasco verán sus activos en Europa bloqueados y tendrán prohibido entrar en suelo comunitario.
También se prohibirán los vuelos de carga procedentes de Siria u operados por aerolíneas de ese país.
Sí se aceptarán los vuelos de pasajeros y los mixtos con el fin de permitir que los ciudadanos europeos que están en el país regresen a sus lugares de origen.
Los ministros, en el marco del encuentro, han insistido en la necesidad de seguir aumentando la presión sobre el régimen sirio mientras no detenga la violencia.
Indicaron que las nuevas sanciones "seguirán recortando las bazas del régimen (sirio) para financiarse", después del corte impuesto por la UE a las exportaciones petrolíferas de ese país en una ronda precedente.
También dejaron en claro que la opción militar está descartada en Siria y subrayaron la necesidad de hacer llegar ayuda humanitaria a la población.