De los 13 miembros del comando, 9 murieron y 4 están detenidos
La Policía mata a Younes Abouyaaqoub, autor de atentado en Barcelona
El puzle de la célula yihadista de Barcelona se cierra. Fuentes antiterroristas confirmaron ayer que el autor de la matanza del jueves en Las Ramblas de Barcelona fue abatido a primera hora de la tarde en la localidad Subirats, a unos 55 kilómetros al este de la capital catalana. Younes Abouyaaqoub, el último miembro del comando que se encontraba en búsqueda y captura desde el jueves, logró escapar del cerco policial tras matar a un joven para apoderarse de su vehículo. Desde ese mismo momento se convirtió en el objetivo prioritario de la Policía que llegó a temer que el terrorista hubiera conseguido atravesar la frontera con Francia. La Interpol se hallaba desde el jueves en situación de máxima alerta y la vigilancia en todos los estados de la Unión Europea (UE) se extremó al máximo.
Sin embargo, el yihadista más buscado no había escapado tan lejos. A primera hora de la tarde en España, dos coches de los Mossos D’Escuadra, policía autonómica de Cataluña, localizaron un vehículo sospechoso en los alrededores de la pequeña localidad barcelonesa Subirats, a unos 55 kilómetros de la capital catalana. Tras darle el alto, salió del vehículo el último miembro del comando al grito de ‘Ala akbar (Alá es grande)’ exhibiendo lo que parecía ser un cinturón cargado de explosivos y que resultó ser falso. Minutos después, Younes Abouyaaqoub yacía en el suelo abatido por disparos de los agentes. Con su muerte nueve son los miembros del comando que perdieron la vida en esta acción terrorista. Otros cuatro sospechosos están detenidos.
El miércoles, pocas horas antes del brutal atropello en Las Ramblas, una explosión destruyó una vivienda en la localidad tarraconense Alcanar. Lo que parecía un accidente doméstico, en era realidad el origen de la tragedia. Tras pesquisas rutinarias, los Mossos (policía oficial) encontraron entre los escombros un centenar de botellas de propano, así como restos de acetileno y del explosivo TATP, utilizado habitualmente por el grupo terrorista Estado Islámico (EI) que lo bautizó con el nombre de ‘la madre de satán’.
Además descubrieron el cadáver de una persona y restos biológicos de otras dos. La explosión provocó heridas a uno de los ocupantes de la vivienda, actualmente uno de los cuatro detenidos y cuyos interrogatorios, siempre, según el mando policial catalán, Josep Lluis Trapero, “ha permitido obtener información relevante” sobre lo que pudo suceder y al final sucedió.
El comando yihadista llevaba seis meses planificando la acción terrorista en Barcelona. Para ello habían rentado tres furgonetas -la del atropello de Las Ramblas y las que se localizaron en Vic y Cambrils- así como un coche de gran potencia, un Audi3, con el que perpetraron el ataque en Cambrils, y una moto.
Según se desprende de la investigación que sigue abierta, la intención era lanzar de manera simultánea las tres minivans cargadas de explosivos contra lugares concurridos de Barcelona. Aunque no han confirmado de qué lugares se trataba, uno de estos podría ser la explanada de la Basílica de la Sagrada Familia, donde miles de personas se congregan cada día para deleitarse con la gran obra inacabada de Antoni Gaudí.
Aquella vivienda de Alcanar era su base de operaciones sin que nadie sospechara nada de ellos. El jefe policial afirmó que los servicios de inteligencia no recibieron ni una sola alerta de los inquilinos de la vivienda, ni tampoco sobre las actividades de radicalización sistemática que realizaba el imán de Ripoll, Abdeldaki Es Satty, desde su llegada a España hace cuatro años.
Ante la falta de confirmar el análisis de DNA de los restos biológicos encontrados en la vivienda de Alcanar, Satty es posiblemente uno de los tres activistas fallecidos en la explosión. Ninguno de los integrantes de la célula tenía antecedentes por terrorismo, ni tampoco eran sospechosos por difundir ideas extremistas en su entorno.
Pese a lo que ha venido contándose en los últimos días, el mayor de los Mossos D’Escuadra aseguró que no hay datos suficientes para confirmar que el imán de Ripoll fuera la persona que reclutó a los demás miembros de la célula, todos excepto Satty con edades comprendidas entre 17 y 25 años.
Younes Abouyaaqoub, conductor de la furgoneta que causó la matanza del jueves en Barcelona, tenía 22 años y era hermano de Houssaine, el menor del grupo con 17 años, muerto en el tiroteo de Cambrils en el que también fallecieron otros cuatro activistas durante la noche del jueves. (I)
OTROS ATENTADOS
Un hombre embistió ayer con una furgoneta dos paradas de autobús en Marsella, en el sureste de Francia, dejando un muerto y un herido grave, antes de ser detenido por la Policía, que por el momento descarta la pista terrorista.
El vehículo, una furgoneta de marca Renault Master, arremetió temprano en la mañana la primera parada de autobús en el distrito 13, en el noreste de la ciudad portuaria, hiriendo de gravedad a una mujer que se encuentra hospitalizada.
El conductor se dirigió después al vecino distrito 11, más al sur, donde embistió su coche contra una segunda parada, matando a una persona. El alcalde del distrito 11, Julien Ravier, dijo a la cadena de televisión BFMTV que la víctima mortal era una mujer de unos 40 años que se encontraba en ese momento sola en la parada de autobús. (I)