La historia de la familia que creó el álbum del Mundial
Una de las tradiciones que van de la mano con el Mundial de fútbol, es la afición de completar el álbum con cada uno de las figuras de los equipos que disputarán uno de los torneos más importantes del mundo deportivo. La idea nació en el seno de una familia italiana en 1945, este año lanzó su primera edición digital.
Todo empezó con un emprendimiento de cuatro hermanos: Guiseppe, Benito, Umberto y Franco Panini, cuyo apellido sería el que dé el nombre a la compañía.
En esa época, la familia tenía un kiosco a las afueras de la catedral de la ciudad de Módena, que era dirigido por la madre. Con el tiempo, el negocio pasó a dar particular preferencia a los diarios deportivos que eran más consumidos. Se dieron cuenta que el fútbol era el escape al que recurría la sociedad que en ese entonces atravesaba la era pos Mussolini, el dictador fascista que había sido fusilado en abril de 1945, dos años después del fin de décadas de tiranía.
En 1954 fundaron la Agencia de Distribución de Periódicos Hermanos Panini, en ese momento ya habían descubierto la popularidad de las tarjetas coleccionables que incluían revistas en formato de promoción. En 1960 compraron la empresa de estampas deportivas Nannima y un año después fundaron la editorial Grupo Panini con el que lanzaron el primer álbum Panini del campeonato italiano de fútbol, poniendo en su portada al sueco Nils Liedholm, jugador emblemático del AC Milan.
Para finales de los 60s, los cuatro hermanos Panini pusieron en marcha su imperio de cromos. Umberto creó la máquina que introducía las figuritas dentro de sobres.
Según la propia empresa, su primera colección de fútbol vendió 3 millones de sobres. La cifra llegó a 15 millones un año más tarde y ascendería a 29 millones en el siguiente periodo. Actualmente, se estima que Panini vende 6.000 millones de sobres al año.
El primer álbum Panini dedicado a una Copa Mundial de Fútbol fue el de México 70 y en 1980 se lanzó la primera colección sobre la Eurocopa.
A día de hoy, Panini sigue siendo auspiciador oficial del Mundial, aunque desde 1989 ya no está en poder de los hermanos que vendieron la empresa al británico Robert Maxwell, por 96 millones de libras.
Actualmente, la firma se encuentra en manos de la firma de Módena y tiene siete unidades de negocio: los coleccionables, que incluye stickers y tarjetas; la editorial, que publica revistas, libros, cómics, manga y novelas gráficas; una distribuidora para sus productos y de terceros; la pata de licencias; fascículos y colecciones; digital y el servicio de productos customizados para clientes.