La Gomera no advierte mejor clima para atenuar las llamas
El fuego siguió arrasando ayer la isla española de La Gomera, en el archipiélago atlántico de Canarias, mientras que el resto de incendios forestales que afectaban a distintos puntos del país, incluida a la vecina Tenerife, se ha controlado después de arrasar miles de hectáreas.
Los técnicos no prevén que los frentes más activos de La Gomera queden estabilizados en las próximas horas, ya que las previsiones meteorológicas son de ascenso de las temperaturas y disminución de humedad y vientos, a pesar de que en el resto de España el fuerte calor ya ha empezado a remitir.
Esto puede provocar que focos que parecen extinguidos se reactiven, afirmó Juan Santana, director general de Seguridad y Emergencias, por lo que no se ha autorizado todavía que las más de 4.500 personas que se encuentran desalojadas pueden regresar a sus casas.
En Tenerife están afectadas unas 369 hectáreas y unas 470 en La Gomera, que se suman a las 3.100 que ya se vieron dañadas antes de que el viernes se reavivara este incendio que comenzó el sábado. Fuentes municipales de Tenerife explicaron que el siniestro de esta isla está estabilizado, salvo en un frente “muy complicado” de 150 metros entre Bolico y Santiago del Teide.
Un total de seis helicópteros y tres hidroaviones trabajaron para evitar el avance de las llamas en La Gomera, mientras que en Tenerife se han incorporado a los trabajos de extinción 72 militares de la Unidad Militar de Emergencias (UME) de las Fuerzas Armadas españolas procedentes de Sevilla (sur de España).
En la región de Galicia (noroeste), los alcaldes de O Barco y Rubiá, municipios afectados por el incendio registrado este fin de semana, aseguraron que la situación parece “tranquila”, si bien con la presencia todavía de algún foco activo en ambas localidades.
El incendio que se inició el pasado viernes en la parroquia de Santigoso, en O Barco, en la provincia gallega de Orense, supera las 1.200 hectáreas, según los datos provisionales del gobierno regional gallego, con lo cual se convierte en el primer gran incendio forestal del verano en Galicia.
Trabajan en las tareas de control de los fuegos 2 técnicos, 15 agentes forestales, 60 brigadas, 25 motobombas, 6 palas, 13 helicópteros, 16 aviones y efectivos de la UME.
El alcalde de Navas de Estena, en Ciudad Real (centro), Isidro Corsino, indicó a EFE que el incendio del Parque Nacional de Cabañeros puede haber afectado a cerca de un millar de hectáreas.
Según datos del Ayuntamiento, las llamas han quemado una gran parte de la zona de monte público de propiedad municipal, además de zonas de fincas privadas.
El regidor dijo que el fuego está “bastante controlado”, ya que los medios aéreos y terrestres continúan trabajando en las labores de extinción.