Ambas partes sostendrán un segundo encuentro el próximo martes
La economía y la violencia son ejes del diálogo en Venezuela (VIDEO)
La apertura del diálogo formal entre el Gobierno del presidente Nicolás Maduro y líderes de la Mesa de la Unidad Democrática (MUD) se convirtió en una cadena televisada de reproches mutuos, en los que la oposición comenzó perdiendo al acudir dividida, mientras que el oficialismo cobró cierto reconocimiento internacional al mostrar su disposición a buscar una solución pacífica al conflicto político y social, según la lectura de varios analistas.
Se sentaron a hablar, en vivo y en cadena nacional de radio y televisión, figuras como el presidente Nicolás Maduro; el presidente de la Asamblea, Diosdado Cabello; el vicepresidente Jorge Arreaza y el canciller Elías Jaua, con los líderes de la MUD, Henrique Capriles, Ramón Guillermo Aveledo, Henry Ramos Allup, Roberto Enríquez, entre otros.
El encuentro se prolongó por casi seis horas y concluyó con un acuerdo para reunirse el próximo martes, a fin de trazar una hoja de ruta para terminar con el conflicto político.
Para este encuentro deberá fijarse una agenda regida por el tema económico y creada por una comisión integrada por delegados del gobierno y de la oposición.
Los diálogos comenzaron el jueves pasadas las 21:00. Maduro comenzó su intervención manifestando que no fue fácil llegar hasta las instancias de sentarse a hablar de paz, porque “desde algunos sectores de la oposición hay presiones para continuar en los caminos violentos que han causado dolor y angustia en el pueblo venezolano desde hace ocho semanas”.
El Mandatario recordó las circunstancias que motivaron a los opositores a acometer un golpe de Estado contra el presidente Hugo Chávez hace justamente 12 años. Luego de los hechos del 11, 12 y 13 de abril de 2002, dijo, el Comandante supo conducir a la patria de manera valiente tras el permanente asedio y agresión contra su gobierno.
VIDEO: Todas las intervenciones del diálogo de paz entre el Gobierno y la oposición
Maduro, que al principio del encuentro se tomó una hora y luego cerró la reunión pasada la 01:00 de la madrugada, cuestionó y criticó las protestas que denominó “guarimbas” y que denunció como una forma ideada para sustituir al Gobierno por la vía no constitucional.
En este sentido, exhortó a los líderes de la MUD a crear un modelo de coexistencia y reconocimiento mutuo. “Una cosa es la protesta y otra cosa son estas guarimbas que angustian”, aseveró.
El Mandatario precisó que en la reunión no había espacios para “negociaciones ni pactos”, por lo que exhortó a buscar “un modelo de tolerancia mutua”.
La dureza del gobierno en la reunión de este jueves sería el resultado de las presiones internas de sectores radicales del chavismo, según el analista Nicmer Evans, cercano al partido de gobierno.
“Cualquier asomo de un gobierno de conciliación (como el propuesto esta semana por el expresidente brasileño Lula Da Silva) activaría al sector extremista del chavismo, colocando a Venezuela en un abismo” escribió ayer en un artículo Evans.
El presidente de la Asamblea Nacional, Diosdado Cabello, acusó a los representantes de la oposición que participaron en la reunión de ayer, de ser los mismos del golpe de abril de 2002. “Estamos sentados con la misma oposición de hace años, expertos en decir ‘yo no fui’. Siento que ninguno de los que están acá se ha deslindado de la violencia”, aseguró.
Por la bancada del chavismo, el gobernador Aristóbulo Istúriz tuvo la oportunidad de responder y destacó que el mayor problema que tiene el sector de la oposición es el de no reconocer a sus adversarios y no ver la fuerza chavista y el pueblo con el liderazgo que se merecen.
Desde hace nueve semanas Maduro soporta las mayores protestas de su primer año de gestión, algunas degeneradas en disturbios, con saldo de 41 muertos, más de 670 heridos y 120 denuncias por violaciones de derechos humanos, sin que gobierno y oposición se hubiesen sentado en una mesa hasta ahora.
Oposición fue escuchada
Los integrantes de la MUD lograron ser escuchados. El gobernador del estado Miranda y líder opositor, Henrique Capriles, dijo que Venezuela estaba “muy mal” y que la crisis que vive el país se originó tras los comicios presidenciales de abril de 2013, en los que perdió la presidencia frente al actual gobernante Nicolás Maduro.
“Ni queremos un golpe de Estado ni queremos un estallido social. (...) Queremos que este problema se resuelva (... pero para ello) respetemos la Constitución, dejemos la represión”, reclamó Capriles.
El secretario del partido Un Nuevo Tiempo, Omar Barboza, por su parte, repudió la política económica del Gobierno del presidente Maduro. “La escasez hoy se ubica en 31%, según cifras del Banco Central de Venezuela. Eso significa que hay una caída de la producción nacional, lo más común en Venezuela son las colas y el ‘no hay’. Y el dólar paralelo está por encima de 60. Hoy no se sabe cuánto vale un bolívar, pero sabemos que no alcanza para nada”, expresó.
Henri Falcón, gobernador de Lara, defendió el espacio de la reunión como una oportunidad para decir la verdad, pero también criticó la política económica del gobierno. “Yo no hablo de guerra económica, yo hablo de improvisación económica (…) Hay un desabastecimiento y una inflación que nadie puede negar”, puntualizó.
El analista político y ensayista Manuel Felipe Sierra aseguró a la AFP que el encuentro fue “apenas un comienzo (...) que muestra la voluntad de resolver los problemas”, pero sobre el que “no pueden ponerse muchas expectativas”.
Para Sierra fue notable la ausencia de los factores radicales de la protesta que, asegura, “deben incluirse en nuevos encuentros”.
Según Gabriel Conte, director del portal MDZ, el presidente Maduro ganó durante el debate porque mostrándose dispuesto al diálogo, su gobierno logró reconocimiento internacional.
En este sentido, Conte considera que la oposición arrancó perdiendo los diálogos ya que no participaron todos los partidos de la MUD y dirigentes más radicales como María Corina Machado y Leopoldo López (detenido) rechazaron este encuentro. Esto debido a sus divisiones internas, lo cual a su vez “no puede garantizar el cumplimiento de acuerdo alguno por parte de toda la oposición”.
Rafael Venegas, de Vanguardia Popular, dijo que, aunque no fueron consultados por la MUD, el diálogo es el camino idóneo para resolver la crisis del país, porque las protestas no tienen la fuerza para cambiar al gobierno. Sin embargo, considera esencial que incorpore a estudiantes, ONG y trabajadores.
Conte también resaltó el papel que cumplió la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur), pues los cancilleres del bloque fueron los que lograron este acercamiento entre el Gobierno y la oposición. El canciller ecuatoriano Ricardo Patiño es señalado como uno de los artífices de la nueva imagen del gobierno bolivariano, agrega Conte.
DIARIO RECIBE PAPEL DE ANDIARIOS
El editor del diario venezolano El Nacional, Miguel Henrique Otero, recibió ayer un préstamo de papel enviado por periódicos colombianos para que su rotativo pueda seguir circulando, dada la escasez de divisas que deben ser aprobadas por el Gobierno para importar el material.
“Esto es el inicio de otros hechos de solidaridad que serán realizados por otros periódicos del continente que ya se ofrecieron en la Asamblea de la Sociedad Interamericana de Prensa (SIP) a darnos papel, mientras que el país se compone o mientras el Gobierno toma la decisión de darnos las divisas para importar el papel”, dijo el presidente-editor del Diario.
Según Otero, el préstamo hecho por la Asociación Colombiana de Editores de Diarios y Medios Informativos (Andiarios) permite a su periódico seguir circulando durante 2 semanas, lo que sumado a las reservas que aún le quedan de papel, garantizan la salida hasta fines de mayo.
En total la asociación colombiana envió 52 toneladas de papel a 3 periódicos: El Nacional, El Nuevo País (de Caracas) y El Impulso de Barquisimeto (oeste del país). Estos diarios participan en la campaña ‘Todos Somos Venezuela’, que dirige Andiarios contra el Gobierno de Nicolás Maduro.
Al menos una decena de periódicos venezolanos han dejado de circular o han reducido sus páginas por los retrasos del Gobierno en la entrega de divisas para adquirir el papel que los periódicos compran a empresas extranjeras. (AFP)