La Casa Blanca consideró hoy que las amenazas de Irán contra el regreso de portaaviones estadounidenses a aguas del Golfo Pérsico a través del estrecho de Ormuz reflejan la "debilidad" del Gobierno iraní y su aislamiento internacional.

El régimen iraní ha amenazado con bloquear el estrecho de Ormuz, vital para el abastecimiento mundial de petróleo, si Estados Unidos y sus aliados continúan adelante con sus sanciones en represalia por su programa nuclear.

Según dijo hoy el portavoz de la Casa Blanca, Jay Carney, en rueda de prensa, las advertencias de Irán "reflejan el hecho de que Irán se encuentra en una posición de debilidad" y son "una confirmación de que se enfrenta a una presión creciente" por no cumplir sus obligaciones con la comunidad internacional.

El Ejército iraní advirtió sobre el retorno del portaaviones estadounidense John C. Stennis y su grupo de batalla al Golfo Pérsico, en coincidencia con el fin de unas maniobras navales cerca del estrecho de Ormuz en las que Teherán hizo demostración de fuerza y probó un misil tierra-tierra.

"Irán está aislado y está intentando desviar la atención de su comportamiento y problemas domésticos" valoró Carney, quien añadió que esto demuestra el impacto que están teniendo las sanciones y el apoyo internacional para presionar a Teherán.

El portavoz añadió que la actitud del régimen iraní está minando la economía de ese país y devaluando su moneda.

El Departamento de Defensa estadounidense ya había señalado hoy que el tránsito de naves de guerra de Estados Unidos por el estrecho de Ormuz es necesario para el abastecimiento de las misiones de Washington en el Golfo y continuarán.

George Little, portavoz del Pentágono, aseguró en un comunicado en Washington que el Departamento de Defensa seguirá movilizando sus unidades militares en el Golfo de acuerdo con sus necesidades a pesar de las amenazas iraníes. EFE