La Alianza del Pacífico busca consolidarse en América Latina y Asia
Los presidentes de México, Chile, Perú y Colombia defendieron el libre comercio como instrumento para generar desarrollo económico sostenido y contrarrestar la pobreza y la desigualdad de sus países, al instalar ayer su VII cumbre en Cali.
El presidente colombiano, Juan Manuel Santos, que recibió la presidencia pro témpore del grupo, destacó que ninguno de los ideales que los definen -defensa de la democracia y del libre comercio- “tienen valor si no se traducen en bienestar, creación de empleo y prosperidad para nuestros pueblos”.
A su vez el mandatario peruano, Ollanta Humala, sostuvo que “el gran reto de América Latina es cerrar la brecha de la desigualdad. La Alianza del Pacífico tiene que ser una oportunidad, sobre todo en momentos de crisis económica planetaria”.
En la misma tónica, el gobernante mexicano, Enrique Peña Nieto, llamó a reconocer “rezagos y desafíos importantes”, señalando que la pobreza y la desigualdad pueden ser combatidas “con desarrollo económico sostenido”.
La Alianza del Pacífico es un mecanismo de integración creado formalmente en 2012 para propiciar el libre flujo de bienes, inversiones y personas entre sus socios y para la búsqueda conjunta de mercados, especialmente en la zona Asia-Pacífico.
Los cuatro países, que tienen las economías más abiertas de América Latina y representan el 50% del comercio regional, ya cuentan entre ellos con acuerdos de libre comercio, y han comenzado a flexibilizar los requisitos de visas y compartir representaciones diplomáticas y comerciales fuera de la región.
La desgravación arancelaria entre los cuatro países alcanza el 90% de las partidas, y en esta cumbre esperaban llegar a acuerdos para desmontar los aranceles del 10% restante, sobre todo de productos agrícolas, en un lapso de siete años.
Al final de la cumbre también estaba previsto anunciar la próxima adhesión de Costa Rica, que tiene hasta ahora estatus de país observador.
En ese aspecto, el mandatario chileno, Sebastián Piñera, que entregó la presidencia temporal del grupo a su homólogo de Colombia, destacó que la Alianza del Pacífico “nació con los brazos abiertos”.
“Esperamos que puedan unirse otros países” bajo los principios de defensa de la democracia y del libre comercio, añadió.
En la ceremonia inaugural estuvieron presentes, además de los gobernantes de los cuatro países miembros, los presidentes de Costa Rica, Laura Chinchilla, y de Guatemala, Otto Pérez.
También asistieron a la cumbre de Cali el jefe del Gobierno español, Mariano Rajoy, y el primer ministro de Canadá, Stephen Harper, así como delegaciones de Japón, Australia y Nueva Zelanda.
En paralelo a la cumbre se instaló también este jueves, en Cali, el primer encuentro empresarial de la Alianza del Pacífico, al que acuden más de 400 compañías de 15 países, según la agencia colombiana de promoción de exportaciones Proexport.
Las empresas que participan en el encuentro representan principalmente a los sectores del petróleo y el gas, las comunicaciones, el cemento, el transporte aéreo y los alimentos.