La agresión de un diputado neonazi en Grecia evidencia la violencia de la extrema derecha
La agresión de un diputado del partido neonazi Chryssi Avghi (Aurora dorada) contra dos ediles femeninas, en plena campaña electoral y ante cámaras de TV, fue un acto revelador para la opinión pública griega, después de años de tolerancia a la violencia de la extrema derecha.
Las imágenes del portavoz de ese partido, Ilias Kasidiaris, golpeando tres veces en el rostro a la diputada comunista Liana Kanelli durante un debate televisivo en directo el jueves provocaron conmoción y el clamor del conjunto de la clase política.
Instantes antes, Kasidiaris había arrojado un vaso de agua al rostro de otra edil, Rena Dourou, del partido de izquierda Syriza.
El gobierno denunció "categóricamente" un "ataque contra la democracia", a casi una semana de las legislativas del 17 de junio.
El avance de Chryssi Avghi en la anterior elección del 6 de mayo, y su participación en el diálogo público "lo hicieron salir de la sombra y revelaron su comportamiento fascista, disimulado hasta ahora por su casi-clandestinidad", afirmó Sophia Vidali, criminóloga en la universidad de Tracia (norte).