Bogotá

El presidente colombiano, Juan Manuel Santos, advirtió a la guerrilla comunista de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), con la que negocia el cese al fuego, que no cederá a su pretensión de declarar una tregua bajo la presión del secuestro.

“Si las FARC creen que a través de los secuestros van a tratar de presionar al gobierno para lo que ellos aspiran, y es un cese al fuego, se equivocan”, dijo Santos este jueves en un acto público en el caribeño puerto de Cartagena, a 1.090 km al norte de Bogotá.

“Todo lo contrario. Esto lo que nos estimula es a ser cada vez más contundentes (en la lucha armada del Estado contra las FARC)”, agregó el presidente, quien ha dejado en claro desde el inicio de las negociaciones que solo habrá una tregua hasta que se acuerde el fin del conflicto armado con esa guerrilla.

“Terminamos esta guerra por las buenas o por las malas”, agregó, al pedirle a las Fuerzas Armadas que “no bajen la guardia ni un minuto”, pero subrayó que prefiere terminar con el conflicto “por las buenas”.

El pronunciamiento de Santos se produjo a raíz del secuestro de dos patrulleros de la policía el pasado viernes, y que, según el ministro de Defensa, Juan Carlos Pinzón, las FARC son las responsables.

Al respecto el presidente Santos aseguró que “tenemos la información certera de que están vivos” los secuestrados, y agregó que se comprometió con sus familiares “a no descansar hasta verlos libres”.

Este jueves al reanudarse en Cuba las conversaciones entre los delegados del Gobierno colombiano y de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), Iván Márquez, principal delegado de los rebeldes, puso en duda que el secuestro lo haya realizado su grupo.

Las negociaciones se retomaron tras un receso de seis días y en medio de nuevos combates en Colombia, que dejaron nueve muertos (5 guerrilleros y 4 soldados).

Este jueves, tres ingenieros que habían sido secuestrados el miércoles en el sur del país fueron dejados en libertad por la presión militar ejercida, según el Ejército, que atribuyó a las FARC la acción. Uno de los ingenieros, César Galeano, indicó a los periodistas que los hombres que se los llevaron les dijeron que “estábamos en manos de las FARC”.

Ante esta situación, las FARC reclamaron ayer la necesidad de una “gran campaña para proteger” la mesa de conversaciones que intenta alcanzar la paz en Colombia y dar tiempo suficiente a los diálogos.

“Frente al escalamiento de la guerra que ordena el gobierno, desde nuestra legítima resistencia, nuestra insistencia es que escalemos los intentos por alcanzar la paz y que hagamos una gran campaña para proteger la mesa”, señaló el grupo rebelde en un comunicado leído por su jefe negociador, Iván Márquez.

Las FARC es la guerrilla más antigua de América Latina con 48 años de sangrienta lucha armada contra el Estado colombiano.

EX PRESIDENTE URIBE LANZA MOVIMIENTO ELECTORAL EN COLOMBIA

El ex presidente colombiano Álvaro Uribe (2002-2010), férreo opositor al diálogo de paz con las FARC que adelanta su sucesor Juan Manuel Santos, vuelve con un nuevo movimiento político llamado Centro Democrático al ruedo electoral de 2014, exaltando sus logros en seguridad pese a los cuestionamientos por abusos a los derechos humanos.

Uribe, quien con una alta popularidad gobernó en dos períodos sucesivos y no puede optar a un nuevo mandato presidencial, presentó a sus candidatos para las elecciones presidenciales y legislativas del año próximo, en las que Santos,  intentaría la reelección.