Jefe de misión de la ONU en Siria pide parar la violencia
El general Babacar Gaye, jefe de la misión de supervisión de las Naciones Unidas en Siria, hizo ayer un llamado a las partes en la crisis para dejar a un lado la violencia y participar en un diálogo.
El pronunciamiento de Gaye se dio luego de que el gobierno sirio acusó a los opositores y sus aliados occidentales de negarse a emprender un diálogo para resolver la crisis que enfrenta esta nación del Levante.
Gaye resaltó la necesidad de un cambio de la confrontación y la lucha armada a favor del diálogo, primero a nivel local, y luego a nivel nacional, conforme a lo acordado en el plan de seis puntos del enviado de la ONU a Siria, Kofi Annan.
El funcionario subrayó que para esto es necesario que todas las partes se comprometan a poner fin a la violencia y al diálogo político.
Por su parte, el secretario general de la ONU, Ban Ki-Moon, informó que Gaye y su equipo fueron atacados en dos ocasiones. “Nadie resultó herido en estos ataques gracias al blindaje de los vehículos”, afirmó Ban.
En tanto, los combates entre el Ejército sirio y los rebeldes se recrudecieron ayer en la ciudad de Alepo, la segunda más importante de Siria, en el tercer día de ofensiva militar en la zona, mientras otros puntos del país también fueron sometidos a fuertes bombardeos.
En Alepo, los choques se concentraron en los barrios de Salahedín, Bab Al Hadid, Hamedin, Akiul Shar y Al Sajur, entre otros, según las autoridades, que dijeron haber matado y herido a un "gran número" de supuestos terroristas, como denomina el régimen a los opositores armados.
Desde que comenzó la revuelta contra el régimen en marzo de 2011, el conflicto en Siria ha causado más de 17.000 muertos, un millón y medio de desplazados y alrededor de 150.000 refugiados en los países vecinos, según la ONU.