Las autoridades de la provincia japonesa de Saga sacrificaron 69 mil pollos tras detectar una cepa altamente patógena de gripe aviar en animales muertos en una granja, divulgó hoy el servicio de noticias Kyodo.

El sacrificio se llevó a cabo después de que se confirmara la presencia del subtipo H5 del virus en unos 40 pollos hallados en la localidad de Kohoku.

Hasta ahora el número de aves sacrificadas en el país supera los 1,17 millones, pues también se reportaron casos en granjas de Niigata, Aomori, Hokkaido, Kumamoto y Miyazaki.

Para intentar contener el brote, las autoridades prohibieron el movimiento de aves y huevos en un radio de varios kilómetros en torno a las granjas afectadas, según la fuente.

Se trata de la primera vez que el virus reaparece en Japón desde finales de 2014, y es el peor brote desde 2011, cuando el foco detectado en la provincia de Miyazaki obligó a ultimar a unas 700 mil aves. (I)