El 33% de los brasileños aprueba el Gobierno de Jair Bolsonaro, el mismo porcentaje de quienes lo reprueban, según los datos de la encuesta del instituto de opinión Datafolha.

Según el sondeo, el 33% considera "óptimo o bueno" su administración, mientras que el 31% la evalúa como "regular", el 33% "malo" o "pésimo", y el dos por ciento restante no supo o no quiso responder.

La encuesta anterior, realizada en abril, arrojaba porcentajes similares, aunque desde entonces se ha producido un desgaste de la imagen del Gobierno: entonces, el 32% lo evaluaba positivamente; el 33% regular, y el 30% lo definía como malo o pésimo.

No obstante, son mayoría los que están decepcionados con los seis primeros meses de Gobierno del dirigente ultraderechista.

El 61% de los encuestados considera que ha hecho por el país "menos de lo que se esperaba", el 22% cree que ha hecho lo que se esperaba de él y el 12% considera que incluso superó las expectativas.

La encuesta se realizó los días 4 y 5 de julio en base a 2.086 entrevistas realizadas en 130 ciudades del país y su índice de confianza es del 95%.

Críticas por declaraciones sobre trabajo infantil

Esta encuesta se da en medio de las polémicas declaraciones en las que defendió el trabajo infantil poniendo como ejemplo su propia experiencia personal. "Mira, yo trabajé con nueve y diez años en una granja, y no me perjudicó en absoluto", comentó el mandatario en una transmisión a través de Facebook.

"Cuando un niño de nueve años o diez años trabaja, la gente dice que se trata de trabajo de esclavo o trabajo infantil, pero cuando está fumando crack, nadie dice nada", afirmó.

Sus comentarios provocaron reacciones en las redes sociales. Algunos usuarios echaron en cara al mandatario no conocer la situación real de los niños que enfrentan este problema.

"Al contrario de lo que piensa Bolsonaro la realidad de los niños que son víctimas de explotación y el trabajo infantil es otra", afirmó una usuaria, que aportó algunos datos.

Otros tuiteros acusaron a Bolsonaro de ofrecer declaraciones irresponsables para el cargo que ocupa en el país. "Actúa de una manera inapropiada y avergüenza a los brasileños. Es uno de los capítulos más grotescos de nuestra historia", señaló otra mujer. (I)