El Consejo de Ministros de Italia aprobó este jueves un decreto ley en el que se establece que los inmigrantes indocumentados que lleguen al país podrán permanecer hasta 18 meses en los Centros de Identificación y Expulsión (CIE).

"Con el decreto aprobado hoy ampliamos el tiempo de retención en los CIE que pasa de seis (límite establecido hasta ahora) a dieciocho meses", explicó el ministro italiano del Interior, Roberto Maroni, en rueda de prensa.

El decreto ley contempla, además, la reintroducción del "procedimiento de expulsión coactivo inmediato" para los inmigrantes clandestinos procedentes de países de fuera de la Unión Europea (UE).

Maroni señaló que estas expulsiones "directas" se aplicarán a aquellos inmigrantes que sean considerados "peligrosos" para el orden público, a los indocumentados sobre los que pese una orden de expulsión, cuando se estime que existe riesgo de fuga o en el caso de personas que violen el período establecido para su marcha voluntaria.

El titular de Interior defendió que esta ley es "coherente" con las normas europeas.

Además, el decreto introduce la posibilidad de expulsión de Italia de comunitarios por motivos de orden público si permanecen en territorio italiano en violación de la directiva sobre la libre circulación de los ciudadanos de la UE.

La aprobación de este decreto ley ha generado críticas en las filas de la oposición.

Así, el portavoz del Partido Demócrata (PD) en la comisión de Políticas de la UE, Sandro Gozi, afirmó que el gobierno afronta el fenómeno de la inmigración con "políticas represivas".

El senador Roberto Di Givoan Paolo, también del PD, dijo que, cuando el Ejecutivo amplió en 2009 el período de retención en los CIE de dos a seis meses, la medida ya suscitó las objeciones de la UE y se preguntó: "¿qué pasará ahora?"