La Iglesia italiana decidió suspender las figuras de padrinos y madrinas en bautismos y confirmaciones por un periodo de tres años. La media, según el papa Francisco, se debe a que “en el contexto socioeclesial actual, el oficio de padrinos y madrinas, en su mayor parte, ha perdido su valor original”.

Monseñor Giacomo Cirulli, obispo de Teano-Calvi, Alife-Caiazzo y Sessa Aurunca, de la provincia de Caserta (Italia) promulgará el próximo 20 de marzo un decreto que oficializa la medida para bautizos, comuniones y el rito de iniciación cristiana de adultos, de acuerdo a lo indicado en la página en Facebook de una de las diócesis.

Una nota emitida por el papa Francisco, en febrero de 2023, explica que la misión de el padrino y la madrina “consiste en acompañar a los catecúmenos o a los candidatos a la confirmación a lo largo de todo el camino de la fe y no sólo en el momento de la celebración del Sacramento. En la actualidad, sin embargo, este papel ha perdido casi por completo su significado, quedando reducido a una suerte de cumplimiento formal o costumbre social”.

La Iglesia aclaró que esta acción no busca disminuir el valor de estas figuras, sino recuperar su identidad y misión. Por ello, en los próximos tres años, las oficinas litúrgicas y de catequesis de las diócesis estudiarán posibles nuevas formas de acompañamiento, que recuperan el verdadero sentido eclesial del oficio de padrino y madrina.