"¡Entréganos a nuestros hijos!", piden a Ortega las madres de presos políticos en Nicaragua
Diez madres de "presos políticos" de Nicaragua y una conocida opositora iniciaron este jueves una huelga de hambre indefinida, hasta que el presidente Daniel Ortega ordene la libertad de sus hijos.
La huelga de hambre por la liberación de al menos 139 "presos políticos" inició esta mañana en el interior de la parroquia San Miguel, en la ciudad de Masaya, ubicada 32 kilómetros al sureste de Managua.
"Ahorita comenzamos diez madres, vino doña Flor Vargas, se agregó, somos 11 (...) lo hacemos como una manera de presión para ver si el dictador se conmueve y nos entrega a nuestros hijos", dijo a Efe la manifestante Diana Lacayo, madre de Scannierth Merlo.
La huelga de hambre de las madres se da en el marco de la crisis sociopolítica de Nicaragua, que ha dejado cientos de muertos, presos y desaparecidos, miles de heridos y decenas de miles en el exilio.
La mayoría de "presos políticos" se han quejado de torturas, tratos crueles e inhumanos, además de temer por sus vidas dentro de las cárceles de Nicaragua.
Las madres afirmaron que han decido hacer la huelga de hambre en la parroquia San Miguel, porque la consideran un símbolo del apoyo que ha dado la Iglesia Católica a las personas que son perseguidas por el Gobierno de Nicaragua.
"Esta iglesia (Católica) siempre abre sus puertas para todos los que necesitan, ellas se han citado para tener un tiempo de oración y una huelga de hambre, estoy abriendo las puertas a los que pueda ayudar", dijo el padre Edwin Román.
En el interior de la parroquia, las madres y decenas de opositores, alzando la bandera de Nicaragua, gritaron consignas como "¡Libertad para nuestros presos políticos!", "¡Justicia!", "¡Viva Nicaragua libre!", "¡Entréganos a nuestros hijos!".
En las afueras, del templo, decenas de patrullas permanecían rodeando la parroquia.
"Vamos a llegar hasta las últimas consecuencias, hasta lograr la liberación de nuestros hijos", reiteró Lacayo.
La Cruz Roja ha anunciado que asistirá a las madres.
Según las madres, la huelga de hambre forma parte de su campaña "Navidad sin presos políticos", que incluye más mujeres con la misma protesta, "piquetes express" (protestas fugaces para evitar ser arrestadas) e intentar hacer llegar al presidente Daniel Ortega una carta de petición de libertad para sus hijos, en fechas que no revelaron.
Las protestas contra Ortega han dejado 328 muertos, según la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), aunque organismos locales cuentan hasta 651 y el Gobierno admite 200.
Tanto la CIDH como la oficina de la Alta Comisionada de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos (Acnudh), responsabilizan al Gobierno por la violencia en Nicaragua, y se han referido en sendos informes a crímenes "de lesa humanidad".
Ortega sostiene que las acciones del Gobierno son para defenderse de un supuesto intento de "golpe de Estado". (I)