El tema principal a tratar será el reconocimiento de las víctimas
Hay 3 puntos por discutir en diálogos con las FARC
Bogotá
Tras más de un mes de receso por los procesos electorales, hoy comienza en la capital cubana, La Habana, un nuevo ciclo en la mesa de negociación entre el Gobierno y las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) en el cual se discutirán el reconocimiento de las víctimas y las vías para su reparación.
En reuniones previas se debatió sobre la forma como los representantes de las víctimas participarán en las mesas, pues el gran reto del Gobierno debe ser el reconocimiento equitativo de quienes han sido afectados por el accionar de las FARC, el Ejército de Liberación Nacional (ELN) y los paramilitares.
Los diálogos se iniciaron en noviembre de 2012 y hasta ahora se han alcanzado acuerdos sobre el tema agrario, la participación política de los desmovilizados y el narcotráfico. Faltan de discutir 3 puntos: la reparación de daños a las víctimas, el abandono de las armas y el método para refrendar los acuerdos.
Según expertos, esta etapa estará marcada por el interés del presidente Juan Manuel Santos en “acelerar” la firma de un acuerdo para poder adelantar reformas políticas que le exigen los partidos de izquierda, sin afectar la negociación y evitar que el ambiente electoral de los comicios locales de octubre de 2015 perturbe el proceso de paz.
“Habrá un mayor impulso e interés del Gobierno para que los diálogos se aceleren, pues este quiere que el proceso de paz termine antes del mes de octubre y se refrende con tranquilidad antes de marzo de 2015, para que no se contamine por el ambiente electoral”, aseguró el politólogo Fernando Giraldo.
Este profesor de la Universidad Javeriana prevé además que “el Gobierno está presionado por la izquierda, que lo ayudó a ganar la reelección para que adelante rápidamente reformas políticas, que si se producen antes del fin del proceso de paz podrían incomodar a las FARC, sobre todo si tocan puntos ya acordados en Cuba sobre la participación política” de los rebeldes.
Giraldo consideró que la izquierda, que optó por la reelección de Santos precisamente para impulsar los diálogos de paz, lo presiona sobre todo para que reforme los sistemas judicial y electoral, ambos claves para las FARC y para el fin del conflicto armado de 50 años.
Hay quienes piensan que los temas pendientes en torno a las víctimas y el desarme es posible resolverlos en el curso de esta negociación. “Más difícil era llegar a los acuerdos anteriores”, aseguró el director del Centro de Recursos para el Análisis de Conflictos, Jorge Restrepo.
Por tanto se avizora “una negociación muy rápida” a partir de mañana, en vista de que se ha consolidado la credibilidad de los equipos negociadores.
“Aparte, la oposición de derecha radical, encabezada por Álvaro Uribe, será ahora desde el Congreso y al canalizarse por un organismo institucional desaparecerá en parte el ruido dañino que se hacía a través de los medios”, afirmó Restrepo.