Haddad ofrece educación en vez de armas y Bolsonaro sigue recabando apoyos
El candidato socialista a la Presidencia de Brasil Fernando Haddad ofreció, este martes 23 de octubre, educación en vez de violencia, durante una visita a uno de los mayores complejos de favelas de Río de Janeiro, mientras que el ultraderechista Jair Bolsonaro se reunió con aliados para recabar apoyos.
Bolsonaro, favorito para ganar las elecciones de este domingo, permaneció recluido en su residencia de Río de Janeiro, donde recibió la visita de alcaldes y se reunió con diputados dispuestos a "perfeccionar la destrozada Seguridad Pública de Brasil", según dijo en Twitter, su principal instrumento de campaña desde que fue acuchillado el pasado 6 de septiembre en un mitin.
Haddad, por su parte, se desplazó hasta el complejo de la Maré, donde volvió cargar contra el discurso de violencia atribuido a su rival en las urnas.
"El otro lado no es esperanza, el otro lado es violencia", aseguró Haddad refiriéndose a la bandera guerrerista que proclama su adversario, un defensor de la dictadura que imperó en Brasil entre 1964 y 1985.
"Bolsonaro solo hizo una cosa en la vida, estimuló la violencia", aseguró el candidato socialista quien recordó que durante los 28 años que ejerció como legislador el ultraderechista no tuvo "ninguna buena idea" y sus propuestas solo van a "aumentar la violencia y el terror" en Brasil.
El candidato socialista, que este martes viajó a Río en su afán de restarle votos en su propio territorio a Bolsonaro, visitó uno de los complejos de favelas más pobres y violentos de la ciudad, donde son frecuentes los enfrentamientos entre grupos narcotraficantes que se disputan el poder y los abusos por parte de las autoridades.
Allí, Haddad escuchó varias quejas de sus habitantes por las continuas matanzas que suceden en esa zona de la ciudad, y señaló que es con la educación con la que se va a vencer a la violencia y esta "se derrota con inteligencia y no con armas".
El candidato del PT recordó el legado del exmandatario Luiz Inácio Lula da Silva, donde la educación, el empleo, la inclusión y el respeto por los derechos fueron prioridad.
El sucesor de Lula, quien fue impedido de participar en los comicios por estar preso y condenado a 12 años por supuesta corrupción, también señaló que incentivar la cultura es otra forma de enfrentar la violencia y por eso anunció presupuesto para el desarrollo de proyectos culturales en la periferias y "no solo al interior de las ciudades" como ocurre actualmente.
En el complejo, que reúne 17 favelas en la zona norte de Río y en el que viven unas 130.000 personas, el candidato petista y su compañera de fórmula, Manuela D'Avila, también recordaron a la concejala Marielle Franco, hija de Maré, negra, lesbiana, activista y política que fue brutalmente asesinada a tiros, junto con su conductor, cuando salía de un acto político en el centro de Río y cuyo crimen, ocho meses después, sigue impune.
Tras una semana con actividades concentradas en Sao Paulo, la ciudad más industrializada y poblada de Brasil, y un fin de semana en el nordeste, la región que más apoya al PT, Haddad eligió hoy viajar a Río de Janeiro, el terreno político de Bolsonaro, en busca de votos de aquellos electores que aún están indecisos.
Según una encuesta divulgada ayer por la firma MDA, Bolsonaro, conocido por sus declaraciones de tinte machista, homófobo y xenófobo, se convertirá en el nuevo presidente de Brasil con un 57 % de los votos válidos, frente al 43 % que conseguiría Haddad.
Durante su jornada en la ciudad más emblemática de Brasil, el candidato socialista también habló con la prensa a quien le expuso su temor de que una victoria del ultraderechista desate una carrera armamentista en la región.
Haddad dijo que recibió un video, cuya autenticidad admitió que aún no constató, en que uno de los hijos parlamentarios de Bolsonaro asegura en un discurso que una de las primera medidas del ultraderechista en caso de que venza las elecciones "es derribar el Gobierno de Maduro".
"Puede haber una escalada armamentista en la región", afirmó Haddad a la prensa al ser interrogado sobre el declarado rechazo del ultraderechista al gobierno de Nicolás Maduro en Venezuela.
En Río de Janeiro el candidato del PT también incluyó encuentros con grupos religiosos del catolicismo y el judaísmo que le manifestaron su apoyo. (I)