Los ataques racistas crecen el 37% en Gran Bretaña
El número de ataques racistas y religiosos en la red de trenes de Gran Bretaña aumentó 37% en lo últimos cinco años, un promedio de más de cinco incidentes de abuso o acoso denunciados por día, según cifras oficiales.
La Policía del Transporte británico (BTP, en sus siglas en inglés), que se encarga de la seguridad de los trenes en Inglaterra, Escocia y Gales y que cubre también la red del metro de Londres, reportó 1.993 ataques racistas o religiosos en 2015, un promedio de 5,5 casos por día.
Excluyendo los incidentes en los que la raza o etnia de la víctima no fue identificada, más del 75% de los delitos reportados el año pasado en el país incluyó a víctimas no blancas: el 36% de los ataques fue perpetrado contra personas de tez negra, el 33% contra personas de origen asiático, el 3% contra mestizos y el 3,5% contra personas de otras razas.
El mayor incremento de ataques radicalmente motivados en los últimos años fue de aquellos contra personas blancas, al representar el 24% de los casos reportados.
La BTP registró el año pasado 346 ataques racistas en trenes que involucraron a víctimas blancas, comparado con 204 casos reportados en 2011, que en su momento representaban el 19% de dichos incidentes.
En el 27% de los hechos, la raza de la víctima no aparece identificada por la BTP.
La información oficial, que fue obtenida por el periódico The Guardian gracias a un pedido hecho a través de la Ley de Libertad de Información, concluyó que el número de ataques racistas que terminaron en la justicia se redujo entre 2011 y 2015, de 704 a 663.
Según el informe, la mayoría de los ataques racistas denunciados a la policía el año pasado fue perpetrado por personas blancas, que representaron el 73% de todos los sospechosos.
En 2015 el 17% de los sospechosos era de tez negra, comparado con el 14% de ellos en 2011.
El tipo de delito racial más común denunciado el año pasado en los trenes de Gran Bretaña incluyó acoso racial o religioso. Ese tipo de casos representó el 58% de todos los incidentes registrados por el BTP.
Ataques raciales en los que no hubo violencia física o lesiones representaron el 11% del total de los casos, es decir 220 incidentes; mientras que aquellos que sí incluyeron lesiones representaron el 1,5%, o 30 hechos.
Un portavoz de la BTP indicó que solo al entender la verdadera escala y naturaleza del problema “podremos crear soluciones duraderas que permitan a los pasajeros y personal ferroviario viajar en un medio ambiente libre de odio racial”.
El vocero pidió a todos aquellos que fueron víctima de ataques racistas denunciarlos de inmediato a la policía. “Lo importante es que la gente sepa que el tema nos preocupa y que vamos a responder a este flagelo”, agregó.
Por su parte, Karen Bradley, ministra para la prevención de abusos y explotación, afirmó que los delitos motivados por el odio u hostilidades hacia personas de otras etnias, razas o religiones “no tiene lugar alguno en nuestra sociedad”.
“Vamos a hacer todo lo que podamos para erradicarlos”, destacó.
“Damos la bienvenida al hecho de que más y más personas estén denunciando ataques racistas a la policía, y que las fuerzas de seguridad mejoren la forma de identificar y reportar estos delitos”, agregó.
Bradley sostuvo además que Gran Bretaña “cuenta con uno de los marcos legales más sólidos del mundo para proteger a distintas comunidades de la hostilidad, la violencia y el racismo”. “Pero no somos complacientes. Es por ello que vamos a publicar próximamente un nuevo plan del gobierno contra los delitos de odio racial y religioso contra este tipo de hechos que ocurren en el transporte público”, señaló la funcionaria.
Bradley dijo también que el gobierno trabaja junto a las diversas comunidades del país para hacer frente a los daños que causan los ataques racistas, y junto a la Policía y la Fiscalía Pública para llevar a la justicia a los responsables de dichos delitos.
En tanto, Mick Cash, secretario general del sindicato de trabajadores del sector ferroviario (RMT), calificó las cifras del informe como “un shock”. (I)