El Gobierno del presidente venezolano, Nicolás Maduro, anunció que ocupó unos 21 mataderos de todo el país por un lapso que se extenderá por 180 días, una medida para "contrarrestar el contrabando" de ganado y piezas de carne que ha "negado el derecho del pueblo a la proteína animal".

"Hemos ocupado temporalmente, por 180 días, los mataderos que han violado la política de precios" controlados, dijo el vicepresidente del área económica de Venezuela, Tareck El Aissami, en una alocución transmitida por la televisión estatal VTV.

El funcionario señaló que la medida busca "prohibir el desvío de los productos y contrarrestar el contrabando de extracción de la carne", así como "garantizar" los precios que estableció el Gobierno en el marco del programa de "recuperación económica" que lanzó Maduro hace poco más de tres meses.

Asimismo, la decisión persigue promover la inclusión de esta proteína en el programa gubernamental de venta de alimentos subsidiados conocido como Clap.

La medida de ocupación, dijo El Aissami, no afectará la "estabilidad" de los trabajadores de estos mataderos, unos establecimientos sobre los cuáles la Vicepresidencia Económica ha pedido una investigación a la Fiscalía.

"No vamos a permitir que ese patrón ladrón, que ha pretendido robarle al pueblo, siga haciendo de las suyas", añadió.

Venezuela atraviesa por una severa crisis económica que se expresa en escasez e hiperinflación, un indicador que el Fondo Monetario Internacional (FMI) pronostica cerrará en 2.500.000 % este 2018 en el país caribeño.

Para atajar esta crisis, Maduro dictó a finales de agosto pasado un paquete de medidas que incluyen la congelación de precios de 25 productos de la cesta alimentaria, incluidas las carnes, cuyo abastecimiento es irregular en todo el país.

En ese sentido, El Aissami dijo que los dueños de los mataderos "iniciaron de alguna manera un boicot" tras la congelación de los precios en agosto pasado, lo que -asegura- causó la escasez que presenta el sector, pese a que se habían "acordado" valores de costo a niveles "internacionales".

La ocupación tampoco afectará la venta en mercados internacionales de subproductos del ganado, como el cuero o el colágeno, "porque generan de alguna riquezas" al país, señaló el vicepresidente. (I)