El diálogo público del Gobierno con la oposición por la paz en Venezuela, comienza este domingo en Caracas, aunque el enviado de la Iglesia Católica, Emil Paul, anunció que sería en Isla Margarita, estado Nueva Esparta.

La sede de las negociaciones se cambió a petición de la coalición de la denominada Mesa de la Unidad Democrática (MUD), cuyos dirigentes también solicitaron la mediación del Vaticano en el proceso.

Al informar del encuentro entre los principales actores políticos, el 24 de octubre último Paul indicó que así se intenta crear "un clima de confianza, superación de la discordia y promoción de un mecanismo para garantizar la convivencia pacífica" en la nación suramericana.

Luego de declaraciones contradictorias de varios dirigentes de la MUD, algunos de los cuales se negaron a aceptar el diálogo, la oposición finalmente accedió a participar en el encuentro, pero en un lugar neutral aún no revelado de la capital venezolana.

Durante la última semana, en manifestaciones de apoyo al Gobierno Bolivariano, el presidente Nicolás Maduro criticó las diferencias entre los líderes de la derecha respecto al proceso pacificador que, según declaró, es objeto de "un boicot por extremistas dirigidos desde los círculos de poder de Estados Unidos".

Por su parte, la oposición también se movilizó para exigir la renuncia del jefe de Estado, a instancias del presidente de la Asamblea Nacional (mayoría opositora), Henry Ramos Allup, y el gobernador del estado Miranda, Henrique Capriles, dos de los principales promotores de un referendo revocatorio contra Maduro.

El Consejo Nacional Electoral anuló el proceso refrendario, debido a las querellas penales contra la MUD por falsa atestación ante funcionario público, aprovechamiento de acto falso y suministros de datos falsos al Poder Electoral, durante la recogida del uno por ciento de la voluntad popular.

A propósito de la suspensión, el Parlamento sesionó de manera extraordinaria y aprobó un acuerdo de seis puntos, el cual desconoce los poderes legalmente constituidos y vislumbra la posibilidad de abrir un juicio político contra el legítimo mandatario, aunque no está comprendido en la Constitución venezolana.

Maduro, que en cada aparición pública insiste en convocar a conversaciones por la paz en el país, estableció el Consejo de Defensa Nacional de manera permanente, para adoptar estrategias contra la intentona golpista de los parlamentarios y las tentativas de obstaculizar el diálogo.

Se espera la participación en el encuentro, este domingo, de representantes de la Unión de Naciones Suramericanas, más el exjefe del Gobierno de España José Luis Rodríguez Zapatero, y los expresidentes de Panamá, Martín Torrijos, y República Dominicana, Leonel Fernández.

El encuentro comienza cuando en el país crece la expectativa respecto a las movilizaciones de la semana próxima convocadas, indistintamente, por el Partidos Socialista Unido de Venezuela y la MUD, y a la demanda que el Gobierno interpondrá contra "el proceder golpista" de la AN, según anunció Maduro. (I)