Renuncia de ministro de Hacienda genera terremoto político en Chile
Desde el retorno a la democracia en Chile en 1990, nunca antes un gobierno debió lidiar con dos renuncias de su ministro de Hacienda, visto como una figura símbolo de estabilidad económica, especialmente en el escenario internacional. Pero ahora, Michelle Bachelet se convirtió en la primera Presidenta que tendrá a un tercer ministro de Hacienda en un solo mandato, algo que ya ha generado una tormenta política y una serie de repercusiones. Y todo esto, en medio de la campaña presidencial y a sólo siete meses de que la mandataria termine su gobierno de cuatro años.
Rodrigo Valdés, que había asumido como el jefe de las finanzas en mayo de 2015 en reemplazo de Alberto Arenas, anunció su salida al mediodía en Chile, lo que generó un inmediato cambio de gabinete. Esta salida ocurre después de que Valdés criticara que un comité interministerial rechazara el desarrollo del proyecto Dominga de 2.500 millones de dólares, justo cuando la economía chilena necesita repuntar. Después de estos dichos, Bachelet dijo que el país necesita crecer, pero cuidando el medio ambiente, lo que fue visto como un distanciamiento total y una crítica implícita a Valdés. El proyecto Dominga, de hierro y cobre, había generado profundas divisiones en el gabinete por su sustentación ambiental.
Nunca antes un mismo gobierno se había visto a la obligación de tener que nombrar a un tercer ministro de Hacienda, la figura más importante del gabinete. Patricio Aylwin (1990-1994) tuvo un solo jefe de las finanzas; Eduardo Frei (1994-2000), tuvo dos ministros de Hacienda; Ricardo Lagos (2000-2006) sólo uno; Michelle Bachelet (2006-2010) uno y Sebastián Piñera (2010-2014) uno también. Por eso, la salida de Valdés es vista como una situación inédita, histórica y extremadamente compleja.
Además, renunció el ministro de Economía, Luis Felipe Céspedes, quien será reemplazado por Jorge Rodríguez Grossi. A su vez, Valdés será reemplazado por Nicolás Eyzaguirre, actual ministro secretario de la Presidencia y ex ministro de Hacienda durante el gobierno de Ricardo Lagos.
Valdés, que había perdido el respaldo de los partidos políticos que conforman la Nueva Mayoría, ya había tenido una serie de conflictos al interior del gobierno. Al anunciar su salida, el ahora ex ministro reconoció que la decisión se debió a “diferencias de criterio”. Lo complejo es que justo ahora viene la discusión del presupuesto 2018 y la implementación del proyecto de la reforma a las pensiones, por lo que la renuncia de Valdés es vista como un mal antecedente que podría generar un escenario poco favorable para Bachelet. Valdés, además, dijo que no logró que todos compartieran sus convicciones.
En el primer semestre del año, la economía chilena tuvo una expansión de apenas un 0,5%, el porcentaje más bajo en ocho años. El Ministerio de Hacienda proyectó en su momento un crecimiento del PIB de 1,5% para 2017. Pero para que eso ocurra, la economía debería crecer por lo menos un 2,4% en la segunda mitad del año, algo que resulta poco probable. De hecho, los analistas económicos coinciden y sitúan el crecimiento para lo que resta del año entre un 1,2% y un máximo de 1,5%. (I)