El gobierno brasileño reforzará a partir de agosto venidero el diálogo con los parlamentarios para garantizar las sanción de medidas que aseguren la retomada del crecimiento económico, afirmaron hoy fuentes oficiales.

Tras una reunión de la presidenta del país, Dilma Rousseff, con titulares del equipo de coordinación política, el secretario de la Aviación Civil, Eliseu Padilha, destacó la decisión de ampliar los contactos con los líderes de las bancadas que integran el Legislativo.

Tuvimos en el primer semestre algunas dificultades para sancionar propuestas gubernamentales en ese hemiciclo y por ello, vamos a intensificar el debate dentro del Congreso, subrayó.

Acompañado de los ministros Nelson Barbosa, de Planificación, y Gilberto Kassab, de las Ciudades, Padilha aclaró que la aprobación de proyectos polémicos, como reducir de 18 a 16 años la edad de responsabilidad penal, no afectan al ejecutivo, sino a todos los brasileños.

Esas acciones, consideradas como "bombas" e incentivadas por el líder de la Cámara de Diputados, Eduardo Cunha, no destruyen a la administración federal, pero si dañan las expectativas de la ciudadanía, aseveró.

"Tenemos que reaccionar ahora para que podamos tener condiciones, políticamente, para hacer que la base, que es mayoritaria, logre mayoría en las votaciones" de las medidas gubernamentales, indicó.

En este sentido, el titular de Planificación señaló el interés de crear un clima positivo que garantice la implementación de los ajustes y recortes propuestas para asegurar la retomada del crecimiento económico, pero esto no depende solo del gobierno.

Corresponde a la administración "proponer y ejecutar las leyes, pero corresponde también al Legislativo y el poder judicial participar en este proceso", enfatizó al defender la necesidad de que los parlamentarios revisen la propuesta de reducción de la meta de superávit primario.

Al referirse al desplome del real brasileño frente al dólar estadounidense, dijo que se trató de una reacción del mercado, debido a los anuncios de disminuir la meta del superávit primario y de realizar otros cortes en el presupuesto de este año.

Barbosa manifestó, no obstante, que las instituciones y la clase política brasileñas son capaces de afrontar el reto de superar la crisis actual, porque el país está mejor posicionada que en el pasado.

Brasil atraviesa ahora por un momento de dificultad, pero el estado cuenta con los instrumentos necesarios para superar estos problemas, enfatizó al descartar que sean utilizadas las reservas internacionales para ayudar a paliar esta situación. (I)