Veintiún policías y dos militares resultaron detenidos en Honduras por su papel en una compleja red de extorsión que afecta a miles de ciudadanos, informaron las autoridades.

Un portavoz de la Fuerza Nacional Antiextorsión (FNA) reveló que, junto a los uniformados, los agentes de ese cuerpo detuvieron también a varios empresarios vinculados a ese delito en el país.

Entre ellos mencionó a un alto ejecutivo de una compañía de telecomunicaciones y al menos tres directivos del sector del transporte que "comenzaron de conductores y llegaron a tener hasta dos unidades cobrando 1,2 millones de lempiras ( $ 55.000) al mes".

Precisamente, en ese rubro, la empresa Transportes Cristina decidió cerrar sus operaciones temporalmente, dos semanas después del asesinato de uno de sus chóferes a manos de una sicaria.

Mientras, los propietarios de Body Gym Hn, un reconocido gimnasio de esta capital también declararon el cierre ante la imposibilidad de seguir pagando el llamado "impuesto de guerra".

Ante ese panorama, el vocero de la FNA pidió a la ciudadanía que "no cierre los negocios sin antes acudir a nosotros; vamos a hacer todo lo posible para que no lleguen a ese extremo".

Diversos informes en materia de seguridad, sin embargo, refieren que más de 40.000 negocios cerraron y más de 130.000 empleos se perdieron de forma directa por ese delito durante la última década, lo que hace de la extorsión uno de los mayores flagelos de Honduras. (I)