¿Puede una mujer embarazada ser candidata a la alcaldía de Roma? ¿Es compatible ser madre y alcaldesa de una gran ciudad? La controversia estalló en la derecha italiana de cara a la misoginia.

La candidatura de Giorgia Meloni, líder del movimiento de ultraderecha Fratelli d'Italia (Hermanos de Italia), encinta de seis meses, para administrar la capital italiana, desestabilizó a toda la derecha, desde la moderada hasta la más xenófoba, que intentaba aliarse para presentar un candidato único para la alcaldía de Roma, cuyas elecciones deberán celebrarse entre mayo y junio.

El domingo, el candidato conservador a la alcaldía de Roma, Guido Bertolaso, vencedor de las primarias internas, conocido por su cercanía a Silvio Berlusconi, instó sin rodeos a Meloni a dedicarse a la maternidad y a evitar una agotadora y "feroz" campaña electoral.

"En vez de gestionar basuras, huecos y ratas de Roma va a tener que amamantar", comentó Bertolaso, generando una ola de reacciones.

"Basta con tanta misoginia, que nadie decida por uno", protestó por su parte Laura Boldrini, presidente de la Cámara de Diputados, quien recalcó que la "maternidad es un valor".

Como un mensaje de apoyo, Berlusconi reiteró que una madre no puede ejercer como alcaldesa.

"Una madre no puede dedicarse a un trabajo que le obliga a pasar 14 horas al día en la oficina", aseguró el magnate en un programa de radio.

Italia "no es un país para mujeres" 

"Nadie me puede acusar de misoginia. Era un comentario amoroso y protector hacia una mujer que estaría sometida a un gran estrés (...) Han generado una tormenta de un vaso de agua", comentó irritado Bertolaso.

Meloni, conocida por su fuerte personalidad, el lenguaje claro y por contar con el apoyo de sectores de la ultraderecha fascista como Casa Pound, no sólo evitó la polémica sino que también conquistó simpatías.

"No quiero discutir, sólo digo con cortesía y orgullo a Bertolaso que espero ser una madre muy buena, al igual que todas aquellas mujeres con mil dificultades y que en condiciones difíciles logran conciliar la maternidad con compromisos profesionales", aseguró.

"Si siguen atacándola por eso, termino por votar por ella", comentó una anónima estudiante en el programa radial.

El jefe de gobierno, Matteo Renzi, también entró en la controversia.

"¡Por supuesto que una madre puede ser alcalde", comentó el martes.

"Si estos hombres hubieran cambiado más pañales en lugar de dar consejos a las mujeres, viviríamos en un hermoso país", escribió en un tuit Roberto Giachetti,candidato del partido Demócrata (PD, izquierda).

Al caso de Meloni se suma el de la política milanesa del Movimiento Cinco Estrellas, Patrizia Bedori, quien fue insultada por su aspecto físico, "fea y obesa", una de las razones por las que retiró su nombre de la lista de candidatas a la alcaldía de Milán.

"Definitivamente este país no es para las mujeres", concluyó Beatrice Lorenzin, ministra de Salud quien dio a luz a gemelos el año pasado, tras señalar el culpable: "la misoginia", es decir la aversión por las mujeres, como explica el diccionario. (I)