El Vaticano desestimó los crímenes de Pinochet, según WikiLeaks
El Vaticano habría desestimado los informes sobre las matanzas perpetradas por el dictador chileno Augusto Pinochet tras el golpe de 1973 y manifestó su comprensión y tolerancia por el derramamiento de sangre tras el golpe de Estado en Chile, según uno de los cables revelados este lunes de WikiLeaks.
"Como es natural, desafortunadamente, tras un golpe de Estado hay que admitir que ha habido derramamiento de sangre en las operaciones de limpieza en Chile", afirmó entonces monseñor Giovanni Benelli, sustituto de la Secretaría de Estado, según el cable.
Asimismo el 18 de octubre (de 1973), un mes después del golpe militar que derrocó al gobierno socialista de Salvador Allende, Benelli expresó "su profunda preocupación, al igual que la del Papa, sobre una campaña internacional izquierdista que tergiversa completamente, y con éxito, la realidad de la situación chilena", indica el documento.
"Benelli -dice un texto del Departamento de Estado estadounidense- lo etiquetó de cobertura exagerada y como posiblemente el mayor éxito de la propaganda comunista".
El arzobispo mostró además su preocupación con el hecho de que los "círculos moderados y conservadores" pareciesen también dispuestos a "creer las vulgares mentiras sobre los excesos de la Junta Chilena".
"Consciente de que la caída de (Salvador) Allende fue uno de los grandes reveses a la causa comunista, dijo Benelli, las fuerzas de izquierda han minimizado el golpe convenciendo al mundo de que la caída de Allende se debió exclusivamente a fuerzas externas y fascistas más que a las deficiencias de las políticas de Allende, como fue el caso", añade el documento.
El entonces subsecretario de Estado del Vaticano insistió además en que los obispos chilenos le habían asegurado que las historias publicadas en medios internacionales sobre la represión desatada en Chile tras el golpe protagonizado por el general Augusto Pinochet el 11 de septiembre de 1973 eran "infundadas".
El cable revela una conversación telefónica mantenida entre Benelli y la Embajada de Estados Unidos en el Vaticano. Esta llamada tuvo lugar apenas cinco semanas después del golpe de Estado contra Allende.
El documento hecho público hoy es uno de los casi dos millones de archivos clasificados del Departamento de Estado de Estados Unidos que ha hecho públicos este lunes la organización dentro de su Biblioteca Pública Wikileaks de la Diplomacia Estadounidense (PlusD).
La nueva biblioteca de documentos confidenciales fue presentada en una rueda de prensa en Washington en la que participó su fundador, Julian Assange, a través de una videoconferencia desde la Embajada de Ecuador en Londres, donde está refugiado desde junio de 2012.