El Senado empezó debate de expropiación de YPF
Mientras el Senado comenzaba ayer a tratar el proyecto de ley de expropiación de YPF (Yacimientos Petrolíferos Fiscales) con la decisión del oficialismo de aprobarlo la semana próxima, Repsol acusaba al Gobierno argentino de querer nacionalizar la petrolera para tapar su propia “crisis económica y social” y el jefe del Ejecutivo español, Mariano Rajoy, prometía defender a la petrolera porque se trata de una decisión “sin justificación alguna”.
En el debate, que se desarrolló en el Salón Azul de la Cámara Alta, donde las comisiones que integran el plenario son presididas por el oficialismo, el jefe del grupo parlamentario del Frente para la Victoria, Miguel Ángel Pichetto, anticipó que, como bloque mayoritario, pretenden avanzar en el tratamiento del proyecto con suma rapidez y celeridad.
Los nuevos gestores de la petrolera, el ministro de Planificación, Julio De Vido, y el viceministro de Economía, Axel Kicillof, comparecieron también ante los senadores para dar detalles sobre la propuesta de la presidenta Cristina Fernández. En la sesión del Congreso, los interventores protagonizaron ayer un duro intercambio de palabras con senadores de la oposición.
La discusión subió de tono cuando el senador Luis Naidenoff, de la Unión Cívica Radical (UCR), la principal fuerza opositora del país, recordó que el justicialismo, al que pertenece el partido gobernante, “autorizó” en 1999 la privatización de la petrolera y que Fernández votó en favor de la operación.
Kicillof reclamó al senador terminar con las “chicanas políticas” y en ese marco se desataron los gritos de uno y otro lado, que desembocaron en descalificaciones entre De Vido y Naidenoff, que tildó de “caradura” y “mentiroso” al ministro. El proyecto de ley establece una expropiación del 100% de las acciones de YPF.
Es decir, si este proyecto de ley prospera en el Congreso, el 51% irá a manos del Estado nacional y el 49% a las provincias productoras de hidrocarburos. Además, declaró que es de interés público la actividad de hidrocarburos de Argentina. El proyecto sostiene que el objetivo es lograr del autoabastecimiento de hidrocarburos.
Repsol anunció ayer que reclamará 10.000 millones de dólares por una decisión tildada de hostil por el Gobierno español, cuyo presidente llega a Latinoamérica en busca de apoyos. “La expropiación sólo es una forma de tapar la crisis social y económica que está enfrentando Argentina”, lanzó el patrón de Repsol, Antonio Brufau. El Gobierno argentino rechazó la valoración de YPF realizada por el grupo español Repsol, y adelantó su intención de revisar el valor de la petrolera.
Mariano Rajoy, quien participa en el Foro Económico Mundial sobre América Latina que se celebra en Puerto Vallarta (México), alertó de que la iniciativa de Buenos Aires perjudica a todos. “Afecta y mucho a la reputación internacional de Argentina, perjudica a España, puede dañar la imagen de Latinoamérica y perjudica a Repsol, que se ha visto expropiada sin justificación alguna”, enfatizó Rajoy.
En el pleno del Parlamento Europeo, la alta representante de política exterior, Catherine Ashton, señaló que la Comisión Europea y el Servicio Europeo de Acción Exterior estudian a fondo este caso, que será debatido el próximo lunes en Luxemburgo.
Ante el anuncio de la expropiación, la agencia de medición de riesgos Moodys anunció ayer que bajó la nota de la petrolera YPF, mientras que Fitch situó ayer la calificación crediticia de Repsol en revisión con “perspectiva negativa”.