Viena.-

El canciller iraní Mohammad Javad Zarif reconoció ayer que existen aún  discrepancias en las negociaciones nucleares, y pidió desde Viena rezar por un “resultado aconsejable” en los diálogos, que transcurren en un ambiente de optimismo.

Zarif se encuentra en la capital de Austria al frente de la delegación de Irán en las conversaciones con el Grupo 5+1 (los miembros permanentes del Consejo de Seguridad de la ONU más Alemania), en los últimos días de diálogo antes de que hoy expire el nuevo plazo fijado para llegar a un acuerdo.

El levantamiento de las sanciones económicas impuestas por Occidente, que la república islámica desea que sea total y simultáneo a la entrada en vigor del eventual acuerdo, es uno de los puntos controversiales en las discusiones.

La prensa iraní citó declaraciones desde Austria del canciller chino Wang Yi, quien destacó ayer que las partes están a punto de sellar el Plan de Acción Conjunta Global, como también se conoce el arreglo, aunque coincidió con Zarif en que existen temas relevantes sin solucionar.

Wang cree en que se pueda hallar una solución aceptable para un pacto definitivo que cierre 12 años de disputas entre Irán con las potencias occidentales por sospechas de que busca desarrollar armas atómicas.
E

l secretario de Estado estadounidense, John Kerry, también afirmó que el resultado de las negociaciones con Irán es incierto.

El programa nuclear iraní fue revelado a principio del 2000 y las negociaciones entre los europeos y Teherán comenzaron en 2003, para intentar desactivar uno de los temas más sensibles y complejos de las actuales relaciones internacionales; pero las negociaciones no fueron plenamente relanzadas hasta 2012, cuando se dieron reuniones secretas entre diplomáticos estadounidenses e iraníes. Esas conversaciones terminaron en un acuerdo macro que ahora debe ratificarse. (I)