El Ejército mexicano captura a once presuntos sicarios de Los Zetas
El Ejército mexicano capturó a 11 presuntos sicarios de la organización criminal Los Zetas en el norteño estado de Nuevo León, siete de ellos involucrados en el asesinato de dos militares, informó hoy una fuente castrense.
Las detenciones se llevaron a cabo en los municipios de Escobedo y Villaldama, señaló un oficial de la Séptima Zona Militar al presentar a los supuestos delincuentes en las instalaciones de la Agencia Estatal de Investigaciones en Monterrey, capital de Nuevo León.
En Escobedo fueron arrestados seis presuntos sicarios, entre ellos una mujer y un hombre menores de edad, luego de su supuesta participación en una agresión, el 20 de enero, contra personal militar, en la que perdió la vida el cabo de infantería Ramiro Alducín Juárez, precisó.
Después fue detenido otro integrante de la misma célula, al que las autoridades identificaron como Edvin Rubén Alejo Ávila o Edwin Alexis Alejo Ávila, de 18 años, quien confesó haber espiado a un militar que fue secuestrado y después apareció sin vida.
Según la fuente castrense, esta célula de Los Zetas es responsable "de diversos asesinatos, secuestros, extorsiones y robos en el municipio de Escobedo", ubicado en la zona metropolitana de Monterrey.
Las declaraciones de detenidos permitieron a los militares ubicar una fosa clandestina donde estaba enterrado el cadáver de una mujer.
En el municipio rural de Villaldama, soldados mexicanos arrestaron el domingo pasado a otros cuatro presuntos "zetas", a quienes les decomisaron armas largas, varios vehículos robados y droga, entre otros objetos.
El Ejército mexicano lleva a cabo en los estados de Nuevo León, Tamaulipas, Coahuila y San Luis Potosí la llamada "Operación noreste", que busca debilitar a los grupos del crimen organizado.
En esa zona del país, una de las más violentas, operan principalmente los carteles de las drogas de Los Zetas y sus antiguos aliados del Golfo, que mantiene una alianza con el de Sinaloa.