EE.UU. y España amanecieron con más resguardo
Nueva York amaneció este lunes con más Policía en las calles y con una población somnolienta, ya sea por las celebraciones espontáneas por la muerte de Osama bin Laden que se prolongaron durante horas o por lo difícil que se hizo anoche conciliar el sueño ante una noticia esperada desde hace una década.
"Cuando me enteré se me quitaron todas las ganas de dormir. Me quedé pegada al ordenador y al móvil tratando de enterarme de todos los detalles. Tuvo que ser mi marido el que finalmente me obligara a acostarme, así que hoy me ha costado levantarme", explicó hoy a Efe Michelle, una trabajadora neoyorquina en su camino hacia la oficina.
Como ella, muchos otros neoyorquinos comentaban el cansancio acumulado y la extraña sensación que les causó recibir el domingo por la noche la noticia de que el cerebro del mayor atentado jamás perpetrado en la ciudad y el más mediatizado de la historia, ha muerto a manos de fuerzas estadounidenses.
Asociaciones de víctimas de los atentados del 11-S expresaron hoy su gratitud al presidente de Estados Unidos, Barack Obama, por la muerte de Bin Laden.
Las autoridades han decidido reforzar notablemente la presencia de agentes en las calles, así como los controles en los tres grandes aeropuertos que dan servicio a Nueva York, en medios de transporte urbanos y en grandes infraestructuras de la ciudad.
Los responsables de velar por la seguridad en la Gran Manzana temen que haya algún tipo de ataque en "venganza" por la muerte el domingo del que fuera líder de Al Qaeda y enemigo público número uno de Estados Unidos.
Se da la circunstancia de que hace justo un año Times Square fue escenario de un atentado fallido con coche bomba que podría haber sido devastador y que se evitó porque el automóvil -con tres bombonas de propano y dos de gasolina, así como relojes con pilas, cables y material pirotécnico-, fue descubierto y desactivado.
En España, el Estado Mayor de la Defensa ordenó hoy extremar las medidas de protección en las zonas de operaciones en las que participan tropas ibéricas, tras la reunión mantenida con la ministra de Defensa, Carme Chacón, y altos cargos para analizar la muerte del líder de Al Qaeda, Osama bin Laden.
El Ministerio español de Defensa también informó de que se mantiene el nivel de alerta, que ya era alto, especialmente en Líbano y en Afganistán, "donde se había elevado recientemente ante la posibilidad del incremento de ataques de la insurgencia contra tropas de ISAF, con la llegada de la primavera" en el hemisferio norte.
Desde el Estado Mayor de la Defensa ya se ha mantenido contacto con todos los responsables de las misiones españolas en el exterior, para pedirles que extremen las medidas de autoprotección.
En cualquier caso, los militares españoles van a seguir manteniendo todas las misiones que desarrollan habitualmente, como patrullas, escoltas y proyectos de reconstrucción, indicaron las fuentes.