Una descomunal tormenta de arena envolvió la ciudad de Phoenix, suroeste de Estados Unidos, la noche del martes, dejándola en la oscuridad y derribando postes eléctricos, informaron medios locales.

La nube, que cubrió la zona metropolitana, tenía unos 95 km de ancho y transportaba vientos intensos de alrededor 100 km/h, según el Servicio Meteorológico norteamericano.

También resultaron afectadas las ciudades de Avondale, Tempe y Scottsdale. Más de una docena de comunidades en la zona estuvieron en alerta de tormenta eléctrica hasta cerca de la medianoche, informaron medios locales.

Fotos y videos en varios sitios internet de noticias locales mostraron imágenes de una nube de polvo invadiendo la ciudad.

Este año, tormentas inusualmente fuertes han afectado Estados Unidos, que está experimentando su temporada más mortífera de tornados en seis décadas y también ha visto inundaciones a lo largo del río Mississippi y una grave sequía en el sur.