La expresidenta de Brasil, Dilma Rousseff, elogió el martes a la izquierda plural en el poder en Portugal, y estimó que esta "coalición progresista" era una "referencia" que permite frenar la subida del populismo y de la extrema derecha.

"La solución hallada por la izquierda en Portugal es una referencia y un ejemplo. Portugal demuestra de una forma muy clara la vía de lo que puede ser una coalición progresista", declaró ante la prensa en Lisboa.

Contrariamente a la "ola conservadora que invade actualmente el mundo" y que ha llevado a "ciertas formaciones populistas y de extrema derecha al poder", la izquierda portuguesa defiende "valores de progreso", agregó.

Tras llegar al poder en noviembre de 2015 gracias a una alianza con la izquierda radical, el gobierno socialista de Antonio Costa canceló varias medidas de austeridad adoptadas por la derecha.

Rousseff, de 69 años, miembro del Partido de los Trabajadores (PT), fue destituida en 2016 bajo la acusación de adulterar las cuentas públicas y fue sustituida por su vicepresidente, el conservador Michel Temer.

Interrogada sobre la elección presidencial en Brasil en 2018, Rousseff descartó presentarse y reiteró su apoyo a su predecesor, Luiz Inacio Lula da Silva, de 71 años.

Según un reciente sondeo, Lula, líder histórico del PT, saldría ganador, a pesar de verse implicado en el escándalo de corrupción de Petrobras.

"Hay una gran probabilidad de que salga elegido. Tiene el 38% de las intenciones de voto [en la segunda vuelta], yo no tengo esa popularidad ni ninguna otra persona en Brasil", aseguró. (I)