La Policía española detuvo a dos ancianos de 73 y 80 años acusados de atracar sucursales bancarias en Barcelona (noreste) disfrazados y con armas de fuego, para después huir con el botín en transporte público.

Los atracadores entraban en los bancos vestidos con ropa reflectante y usando elementos de disfraces y después de obligar a los empleados a entregarles el dinero, les ataban las manos antes de huir.

La Policía regional de Cataluña informó de que, además de los dos ancianos, fueron detenidos otros dos hombres relacionados con los robos.

Los sospechosos fueron arrestados en Madrid, después de que se trasladaran a la capital española para participar presuntamente en otro atraco a una sucursal bancaria.

Uno de ellos se encontraba en un hostal del centro de la ciudad y otro en un domicilio de un barrio popular del sur de la ciudad, donde estaba acompañado de otra persona, que también fue arrestada.

En los dos atracos, que realizaron con dos meses de diferencia, los ladrones se llevaron 77.000 euros (87.000 dólares al cambio actual) en metálico.

Según los testigos de uno de los robos, los dos ladrones hablaban español con acento suramericano y uno de ellos podía ser italiano.

Detenim amb @policia dos atracadors de 80 i 73 anys per robatoris en sucursals bancàries de Barcelona. En total, es van fer amb un botí de 32.000 i 45.000 euros https://t.co/bjyNgqFyN3 pic.twitter.com/5xOWbBoA5e

— Mossos (@mossos) March 23, 2019

Tras establecer los perfiles de los asaltantes y ser identificado uno de ellos por las imágenes de un robo, los agentes de la policía se coordinaron con el cuerpo de los Carabineros de Milán (Italia), que pudieron dar con la identidad del segundo autor.

La Policía comprobó que los dos detenidos tienen un amplio historial delictivo en Italia.

En el domicilio de uno de los ancianos en una localidad próxima a Barcelona, los investigadores encontraron material preparado para cultivar, elaborar y almacenar marihuana, que se encontraba a cargo de un cuarto hombre que también ha sido arrestado.

En los registros realizados, se han intervenido dos cartas de identidad italianas, dos revólveres, una pistola detonadora, un vehículo, dos cascos de moto y otros elementos, además de 3,1 kilos de marihuana. (I)