La inclusión de las delaciones premiadas de exejecutivos de la constructora Odebrecht en la causa que puede invalidar el mandato del presidente brasileño, Michel Temer, dividió el jueves a los jueces del Tribunal Superior Electoral (TSE).

Odebrecht es una de las principales implicadas en el sistema de sobornos pagados por empresas a políticos y partidos para obtener contratos en Petrobras o para facilitar la aprobación de leyes y medidas favorables a sus negocios.

El TSE analiza si la fórmula presidencial vencedora en la campaña de 2014, compuesta por Dilma Rousseff (izquierda) y Temer (centroderecha), cometió abusos de poder político y económico y si se benefició de financiación ilegal procedente del megafraude a la petrolera estatal.

El caso se inició en base a denuncias formuladas a fines de 2014 e inicios de 2015, cuando la operación Lava Jato sobre Petrobras llevaba pocos meses. Pero los investigadores dispusieron de numerosas informaciones suplementarias con la convalidación en marzo pasado de las delaciones premiadas de 77 exejecutivos del grupo.

En declaraciones al TSE en marzo de este año, el ex-CEO de la constructora Marcelo Odebrecht sostuvo que la firma realizó millonarias donaciones no contabilizadas a la campaña de 2014 del Partido de los Trabajadores (PT) de Rousseff.

En la tercera jornada del juicio, el relator Herman Benjamin, favorable a la inclusión de las delaciones de Odebrecht, volvió a oponerse al presidente del tribunal, Gilmar Mendes, que se mostró preocupado por la "estabilidad", y a su colega Tarcísio Vieira, recientemente nombrado por Temer en la máxima corte electoral.

He aquí algunos de los argumentos expuestos:

Elementos ajenos a la demanda

Para Tarcísio Vieira, "quien juzga no puede valerse de elementos ajenos a la demanda". "La sociedad clama por el fin de la impunidad, pero la respuesta, a mi modo de ver, tiene que ser dada por los organismos competentes", recalcó.
Otro juez, Luiz Fux, dijo en cambio que "no deben oponerse obstáculos a la oportunidad de pasar en limpio" unos "hechos que son gravísimos y contaminaron el proceso electoral con las llagas de la corrupción".

El relator Herman Benjamin fue formal: "No abdicaré de presentar los resultados de las investigaciones". Dirigiéndose a tres jueces que mostraron reticencias a su planteo, les pidió "que digan claramente a todos: ¿Odebrecht podría o no podría ser investigada?". Y preguntó: "¿Lo que se pretende es retirar todo lo que se dice respecto a Odebrecht? ¿Es eso?".

Saña cazadora

El presidente del TSE, Gilmar Mendes, sostuvo que el fundamento del proceso es "mantener la estabilidad del sistema". Y agregó: "Hay exageraciones. A veces por cuestiones pequeñas, anulamos mandatos (...). Tenemos que moderar nuestra saña cazadora, porque de hecho uno pone en juego otro valor, que es el valor del mandato.

"El valor de la manifestación popular, acertada o errada". (I)