Curva donde se descarriló tren es un “punto negro”
Santiago.- El accidente del tren que causó 78 fallecidos y más de cien heridos en España ocurrió en una curva pronunciada del tramo de vía convencional que hay a la entrada de la ciudad Santiago de Compostela de la línea de Alta Velocidad Madrid-Galicia.
Mientras los investigadores dilucidan por qué el maquinista encaró dicha curva con velocidad excesiva, 190 kilómetros por hora, otro maquinista denunció ayer en la radio que el lugar del accidente es “el peor punto negro de Galicia”. (Ver infografía ampliada)
Los puntos negros son tramos de la red de carreteras en los cuales se producen muchos accidentes cada año. La categoría de punto negro la determinan las autoridades competentes. En el caso de los ferrocarriles españoles, la autoridad sería Renfe, que hasta ahora no ha caracterizado la citada curva como punto negro.
La curva está situada en una bifurcación llamada A Grandeira. Expertos consultados por 20minutos aseguran que el trazado, aunque cerrado, no resulta excesivamente peligroso. “La prueba es que en 14 meses habrán circulado por ahí 1.500 trenes como el del accidente y ninguno ha tenido problemas, ni con la vía ni con la señalización. Sí hay una restricción de velocidad, pero no un punto negro. Tramos con dificultades hay muchos a lo largo de la red”, señalaron.
Cuatro kilómetros antes del lugar del accidente ya está la notificación para reducir la velocidadEl presidente del Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (Adif), Gonzalo Ferre, por su parte, aseguró que el maquinista del tren, José Francisco Garzón, detenido por “imprudencia”, tenía que haber empezado a frenar cuatro kilómetros antes del lugar del siniestro. “Cuatro kilómetros antes del lugar del accidente ya recibe la notificación de que tiene que empezar a reducir la velocidad porque a la salida del túnel tiene que ir a 80 kilómetros por hora”, explicó Ferre, en declaraciones a TVE.
Ferrer aseguró que desde Ourense el sistema de seguridad que tenían activadas las vías era el ASFA Digital, que está instalado en todas las de ancho convencional del país. El tren cambió a este sistema desde esta capital gallega a pesar de ir por vías de alta velocidad porque el sistema europeo, el ERMTS, estaba dando problemas.
El responsable de Adif subrayó que es el maquinista el que tiene el control de la velocidad y que el sistema ASFA es solo para el tren automáticamente si el conductor se desvanece, se salta un semáforo en rojo o hay un obstáculo en la vía y va a más de 200 kilómetros por hora.
La investigación parece así centrarse sobre el conductor y podría deberse a un exceso de velocidad o a un eventual fallo de los sistemas de frenado automáticos. Durante el accidente, varios vagones descarrilaron y uno de ellos saltó por los aires, cayendo a varios metros de las vías.
Ayer continuaban las tareas de identificación de las víctimas mortales, cuyo balance bajó ayer de 80 a 78, de ellos, 73 ya identificados. El trabajo para identificar los 5 restantes podría tomar tiempo, mientras los expertos inspeccionan “restos humanos” que podrían pertenecer a tres personas diferentes, explicó una portavoz judicial.