Entrevista / Carlos Mesa / expresidente de bolivia
“Confío en que Chile acepte la decisión de La Haya”
Convocado por Evo Morales, el expresidente Carlos Mesa se sumó al equipo que participa de la exigencia por salida al mar para Bolivia. En esta entrevista habla sobre la situación formal del pedido ante La Haya, de la posición de Chile, y da cuenta de cierto optimismo para una resolución favorable, en mediano plazo, a la exigencia boliviana.
¿Cuál es la situación formal de la exigencia boliviana sobre una salida al mar para el país? ¿2015 puede ser un año de buenas noticias para Bolivia en relación a este tema?
En 2015, estimamos, la Corte Internacional de Justicia (CIJ) recibirá los alegatos orales de Chile y de Bolivia referidos a la demanda preliminar de incompetencia que Chile ha presentado ante la Corte. Hasta que el tema de la competencia no sea resuelto, la cuestión de fondo de nuestra demanda está en suspenso. Bolivia cree que los argumentos de Chile para cuestionar la competencia de la Corte no son adecuados, ya que Bolivia no basa su demanda en el Tratado de 1904, sino en los actos unilaterales de los estados, en este caso los compromisos sucesivos que hizo Chile de negociar con Bolivia un acceso soberano al mar para nuestro país a lo largo del siglo XX.
¿Cree que Bolivia ha logrado en los últimos años una legitimidad internacional para esta demanda, expresada en diversos foros, entre ellos el G77+China?
La legitimidad de la demanda boliviana se apoya en las promesas y compromisos de Chile, compromisos hechos al margen y sin tocar el Tratado de 1904. El posicionamiento internacional de Bolivia en los últimos años ha sido muy significativo. Sin duda, la presidencia del G77+China muestra el peso específico de Bolivia ante la comunidad internacional.
¿Qué harán luego de la presentación ante la Corte Internacional de Justicia de La Haya? ¿Cree que Chile se someterá a aquel tribunal, tal como lo hizo en un litigio con Perú años atrás?
Chile ha demandado a la CIJ de incompetencia. Nosotros creemos que la Corte desestimará esa demanda. Una vez que esta se haya pronunciado habrá que ver qué es lo que decide hacer Chile.
¿Cómo es el trabajo conjunto de usted, expresidente del país, con el presidente Evo Morales Ayma, quien recientemente fue apoyado contundentemente en las urnas por el pueblo boliviano?
Yo he aceptado la invitación del presidente Morales para ser representante oficial de la Causa Marítima Boliviana. Soy parte del equipo que lleva adelante la demanda marítima y estoy plenamente comprometido con ella.
¿Es optimista respecto a una resolución favorable para Bolivia en el corto o mediano plazo? ¿Por qué?
Sí, somos optimistas, porque nuestra causa jurídica basada en el principio de los actos unilaterales de los estados es sólida. Muchas veces Chile hizo el compromiso y la promesa formal de negociar con Bolivia para entregarle una salida soberana al mar. Esta realidad que tiene jurisprudencia y ha sido considerada varias veces por la CIJ, no puede ser deliberadamente olvidada por Chile. Más allá de las razones morales e históricas, Bolivia basa su demanda en razones jurídicas coherentes. Esa es la razón.
¿Cuál cree que es la relación de esta demanda y el pedido argentino de diálogo con Inglaterra respecto a las Islas Malvinas? ¿Cree que hay una similitud en cuanto al “principio de territorialidad” en ambos reclamos?
La naturaleza de la reivindicación boliviana y argentina es similar en algunos puntos y distinta en otros. Ambas naciones basan su reclamo en la usurpación por la fuerza de territorios que eran suyos. La causa es común en ese sentido y es por eso que Bolivia se solidariza plenamente con Argentina. Las diferencias. Malvinas es un resabio del colonialismo internacional. Argentina reivindica la reintegración de la totalidad del territorio de las islas, Bolivia no pide reintegrar la totalidad del territorio perdido porque firmó un tratado de cesión en 1904, pide un acceso soberano al Pacífico. Jurídicamente la diferencia es que Bolivia basa su demanda en los compromisos reiterados que hizo Chile de otorgarle un acceso soberano a Bolivia, independientemente del mencionado tratado. Por lo que sé, Inglaterra no hizo algo parecido con Argentina.
¿Cuáles son las promesas y compromisos de Chile sobre los que usted afirma que se basa la legitimidad de la demanda boliviana?
Los compromisos a los que nos referimos fueron hechos en 1895 por medio de un tratado de cesión de territorios firmado por ambos estados que no se perfeccionó por un protocolo final no ratificado. Hizo esos compromisos además en 1920, 1923, 1926, 1950, 1961, 1975 y 1983 a través de notas, memorándums y cartas firmadas por presidentes, ministros de Relaciones Exteriores y embajadores que en todas esas oportunidades se comprometieron formalmente con Bolivia a otorgarle un acceso soberano al mar, al margen y sin tocar el Tratado de 1904 que -es bueno decirlo- Bolivia respetó y respeta.
¿Cree que no habrá integración latinoamericana completa hasta que este tema esté saldado del todo, tal como se afirma en ‘El libro del mar’ que Bolivia editó tiempo atrás?
Sí, creo que este problema es uno de los obstáculos mayores en el camino hacia una integración plena de América Latina. Vale la pena subrayar que la importancia del tema para Bolivia, además de las razones económicas, tiene que ver con una cuestión clave. En conflictos limítrofes que mi país tuvo con otros estados no perdió su condición de nación amazónica y nación platense, pero en este caso, además de la pérdida de su acceso soberano al mar, perdió su condición de país de la Cuenca del Pacífico, daño mayor en el siglo XXI en el que esta cuenca juega un rol importante.
Para finalizar, ¿qué le diría a Michelle Bachelet sobre este tema?
La demanda boliviana está en la CIJ de La Haya. Confío en que Chile, como país democrático y respetuoso del derecho internacional, acepte la decisión de la Corte cualquiera que esta sea.